Más de 2.200 personas carecen de hogar en Tenerife

El mayor número de casos se concentra en los municipios de Santa Cruz y La Laguna

El principal rango de edad se sitúa entre los 26 y 65 años

Un momento de la presentación del informe.

Un momento de la presentación del informe. / María Pisaca

D. Ramos

Cáritas Diocesana de Tenerife contabilizó 2.261 personas en situación de exclusión social extrema en Tenerife en 2022. Así lo indicaron desde esta organización durante la presentación del III Informe sobre Exclusión Residencial Extrema en la Isla, que se ha realizado en colaboración con el Cabildo tinerfeño. La cifra supone 477 casos menos que en 2021 (2.738), si bien desde Cáritas hicieron énfasis en que en las oscilaciones influyen múltiples variables y que se debe poner el foco en los más de 2.200 registrados.

El coordinador de dicho informe y del proyecto de Unidades Móviles de Atención en Calle para personas sin Hogar (UMAC), José Antonio Díez, fue el encargado de exponer los datos principales. Díez recordó que este trabajo da continuidad al proyecto que surgió en 2020 y a través del que también se publicaron datos para 2021. Ahora se han presentado los de 2022 y el objetivo es dar a conocer en 2024 los de este año, según apuntó la consejera insular de Acción Social, Águeda Fumero, que puso de relieve que estos estudios son fundamentales para que las decisiones que se adopten en este campo sean acertadas.

Vivir a la intemperie, en recursos alojativos, en «vivienda insegura» (un término que emplean para los okupas) o en «vivienda inadecuada» (usado para chabolas o similares) son los escenarios del sinhogarismo. Del total de 2.261 personas en situación de exclusión residencial mayor, la mayor parte se localizan en los municipios de Santa Cruz (885 y un 39,14% del total), La Laguna (331; 14,64%), Arona (301; 13,31%), Adeje (147; 6,5%) y Puerto de la Cruz (113; 5%).

En cuanto a la problemática y temporalidad, el estudio elaborado por Cáritas y el Cabildo establece que «casi cuatro de cada diez personas en exclusión residencial extrema llevan entre 13 y 36 meses en esta situación, y más de un 20% superan los diez años en situación de sinhogarismo», recoge la nota de Cáritas Diocesana. «No en vano, el sinhogarismo es un fenómeno amplio que afecta desde distintos niveles, con múltiples problemáticas y sin una solución única», añade.

Con respecto al contexto, desde Cáritas apuntaron que, «desde la perspectiva global, existe un reconocimiento de una cuestión generalizada, vinculado a la dificultad de acceso a la vivienda, que dentro del marco europeo se está convirtiendo en un tema principal estructural, que afecta, cada vez con mayor prejuicio, a las distintas capas de la población en general. Especialmente en los niveles de población en situación de exclusión». Y añadieron: «Con respecto a Canarias, estaríamos hablando de un 29,1% de la población en situación de exclusión social. De este conjunto, un 14% corresponderían a situaciones de exclusión social severa, donde se puede asegurar que en un 88,8% de estos hogares la concurrencia de condiciones de vivienda insegura e inadecuada determina la situación de exclusión residencial severa».

Mujeres y extranjeros

José Antonio Díez se detuvo en la situación de las mujeres y mostró preocupación por el 25,7% que representan del total. El 73,77% son hombres y el resto, transexuales. «Al igual que en los estudios realizados en 2021 y 2022, el porcentaje de mujeres en esta situación supera el 25%, la mayor parte de las cuales son víctimas de violencia, abusos y agresiones», recoge la nota. «Por ello, hablamos de una doble discriminación y mayor grado de vulnerabilidad, la propiamente dicha del sinhogarismo y el hecho de ser mujer», agrega.

«Las mujeres sin hogar a menudo enfrentan la violencia institucional, que se produce a través de políticas, prácticas y actitudes discriminatorias en los sistemas de ayuda y servicios sociales. Esto puede incluir la negación de servicios básicos, la falta de acceso a refugios seguros frente a la violencia de género al contar con problemas de salud mental o adicciones y la falta de apoyo adecuado para salir de la situación de falta de vivienda», expone la organización. «Es importante destacar que estas experiencias no son universales y pueden variar según el contexto y la ubicación geográfica. Sin embargo, la falta de vivienda en sí misma aumenta significativamente la vulnerabilidad de las mujeres a la violencia y dificulta su capacidad para buscar ayuda y protección», expresa.

También se detuvieron desde Cáritas en la procedencia de los afectados, de los que el 62,23% son nacionales y el 37,77%, extranjeros. «El análisis realizado por Cáritas muestra una amplia representación de nacionalidades, como en años anteriores, alcanzando las 71 nacionalidades incluyendo la española, que representa el 62,23% del total, lo que supone un aumento en casi un 5% con respecto al año anterior», precisan desde la organización que ha elaborado el informe. También refieren que, «debido a la falta de capacidad y recursos para hacer frente a la situación que atraviesa el colectivo de personas migrantes, muchas personas se encuentran sin alojamiento adecuado una vez que llegan a las Islas. Algunos de ellos terminan durmiendo en la calle, en plazas públicas o en condiciones muy precarias en campamentos improvisados». En su opinión, se necesita una red de apoyo.

Grupos de edad

Los mayores rangos se sitúan entre los 26 y 65 años y representan el 71,61%. «Otra similitud con los dos estudios anteriores es la edad media de las personas identificadas en el presente estudio, con 45,6 años en el caso de los hombres y de 35,4 en mujeres», detallaron. La nota de prensa recoge: «El derecho a la salud es fundamental para aquellas personas que se encuentran en situación de exclusión residencial extrema. Lamentablemente, a menudo se enfrentan a barreras significativas para acceder a servicios de atención médica adecuados. La falta de vivienda y la inestabilidad de su situación dificultan el acceso regular a servicios de salud, lo que puede resultar en problemas de salud no tratados, enfermedades crónicas sin control y una mayor vulnerabilidad a enfermedades infecciosas. Además, las personas sin hogar a menudo enfrentan estigmatización y discriminación en el sistema de salud, lo que puede dificultar aún más su acceso a la atención médica».

José Antonio Díez apuntó que, de 801 casos analizados, 56 padecían transtornos mentales (6,99%), 55 depresión crónica (6,87%) y 44 otras enfermedades o condiciones de salud (5,49%). Los anteriores son casos en los que se pudo corroborar con documentación. También se expone sobre estas personas que pueden enfrentar barreras como la falta de documentos de identidad, de transporte o de información sobre los servicios disponibles. «Estas dificultades hacen que sea crucial brindar servicios de salud específicos, incluyendo atención médica en recursos específicos de atención, incorporar técnicos sanitarios vinculados al SCS a las unidades móviles de acercamiento y programas de salud mental que aborden las necesidades particulares de esta población vulnerable, especialmente desde la atención de la Patología Dual (presencia simultánea de una patología de salud mental y una adicción), una de las grandes abandonadas por el sistema sanitario», se completa en la nota de prensa.

Asistencia a los municipios

«Desde el Cabildo prestamos asistencia a los ayuntamientos para combatir el sinhogarismo, especialmente a aquellos municipios que presentan insuficiente capacidad económica, con el objetivo de atender de forma integral las situaciones de riesgo o exclusión social», expresó Águeda Fumero durante la presentación.

Por su parte, el secretario general de Cáritas Diocesana de Tenerife, Ricardo Iglesias, agradeció el trabajo del equipo técnico y de los afectados que colaboraron. «Tenemos datos de tres años, pero entendemos que viene de muy atrás», manifestó este responsable del colectivo social. «Nuestras personas en situación de exclusión residencial extrema se cronifican», resumió. Asimismo, pidió a las instituciones públicas que den un paso al frente para el apoyo a esas personas.