La oposición al parque eólico marino crece al dañar los pueblos del litoral de Arico

Los últimos en pronunciarse, Arico Somos Todos, alegan que su ubicación condiciona el desarrollo de una parte muy importante de la costa y atenta contra la pesca artesanal»

Panorámica de San Miguel de Tajao, en Arico.

Panorámica de San Miguel de Tajao, en Arico. / El Día

J. A. M.

Contaminación química y acústica, afección del fondo marino, interferencias electromagnéticas y daños a la fauna por colisión son algunas de las causas que motivan las alegaciones con las que se opondrán en Arico a la construcción del Parque Eólico Granadilla. Aseguran que genera un impacto negativo en Tajao, Las Arenas, La Caleta y Las Maretas, espacio frente al que se emplazará esta infraestructura.

El último en pronunciarse ha sido Arico Somos Todos, a través de sus dos concejales. Esta formación política local entiende que «su ubicación condiciona el desarrollo de una parte muy importante de la costa de Arico y atenta de manera grave a la continuidad de la pesca artesanal que se desarrolla en Tajao». «Esto es una auténtico atentado. No lo podemos permitir. Lucharemos con todas nuestras fuerzas», sostiene AST.

Ya en mayo del pasado año, el Ayuntamiento de Arico, asociaciones de vecinos y la Cofradía de Pescadores de San Miguel de Tajao presentaron alegaciones a la propuesta de emplazamiento del parque eólico offshore adscrito al Puerto de Granadilla. En ese primer momento ya hablaron de que «afecta negativamente a la calidad de vida de las poblaciones de la costa». Destacó «el consenso social e institucional de preservar toda la franja del litoral de la instalación de parques eólicos y fotovoltaicos para la protección del paisaje y el medio natural, así como favorecer el desarrollo sostenible en este territorio municipal».

Llamamiento

Arico Somos Todos recuerda que los estudios existentes «explican las repercusiones negativas de los parques eólicos marinos en el entorno donde se encuentran localizados». Desde la perspectiva de AST, «supondrá un impacto de tal magnitud que esos sitios serán irreconocibles no solo visualmente, sino con ruidos y con instalaciones de cables y de torres para sacar la energía hacia tierra, lo que hará que estos lugares no vuelvan a ser los mismos jamás». Por eso, hace un llamamiento a los vecinos para que presenten alegaciones.

En exposición

El proyecto Parque Eólico Marino Granadilla y su estudio de impacto ambiental está en fase de información pública. Constará de cinco aerogeneradores situados entre 1.850 y 3.650 metros del Puerto de Granadilla, con una potencia de 50 megavatios. Su construcción e instalación requerirá una inversión de 103.771.367 euros, según el consorcio promotor que forman BlueFloat Energy y Capital Energy, con Esteyco como socio tecnológico.

El estudio de impacto ambiental concluye que el proyecto es compatible y viable. Especifica que más de un 90% del coste, excluyendo el suministro de las turbinas, beneficiará a empresas y tecnologías existentes en Tenerife. Es decir, «trabajo directo para más de 300 personas durante prácticamente tres años, e indirecto para una cantidad aún mayor».