Acentejo

El nuevo techo de la cancha de un barrio de La Matanza captará la energía del sol

El modelo de techado y de aprovechamiento solar se aplicará en otros núcleos matanceros como Guía, San Antonio o Fuente del Lomo

El nuevo techado de la cancha de El Pirul

El nuevo techado de la cancha de El Pirul / El Día

El Día

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El Ayuntamiento de La Matanza de Acentejo continúa con el desarrollo de proyectos que permitan el aprovechamiento de la energía proveniente del sol a través de instalaciones fotovoltaicas, el ahorro económico y la reducción de las emisiones contaminantes. Tras intervenir en colegios, institutos, guarderías, cementerio y numerosas dependencias municipales y deportivas, el Consistorio matancero da un nuevo paso y convertirá el nuevo techo del espacio deportivo y cultural de El Pirul en un campo fotovoltaico, capaz de abastecer las instalaciones y de generar energía para el entorno.

El Gobierno local, liderado por Ignacio Rodríguez (PSOE) desde 1983, quiere convertir este modelo de techado y aprovechamiento energético en el ejemplo a imitar en otros núcleos como Guía, San Antonio o Fuente del Lomo.

Hace unos días, los vecinos del barrio de El Pirul celebraron la finalización de los trabajos de techado de su polideportivo, ubicado junto al centro sociocultural del barrio y a equipamientos como el parque infantil y el área de esparcimiento familiar. Ahora, esa gran cubierta aspira a convertirse en un gran espacio para la captación de energía solar y la generación de electricidad.

El Consistorio subraya «el especial cuidado puesto a la hora de acometer la actuación, preservando el potencial paisajístico que lo distingue de otros espacios deportivos del municipio». Esta dotación pública «emerge en un paisaje de castaños y a pocos metros del comienzo de la zona de pinar, por lo que desde el Ayuntamiento se insistió en compatibilizar la necesidad y ventajas de cubrir la cancha, con la de poder continuar disfrutando desde ella del paisaje, evitando crear un compartimento cerrado y aislado del entorno».

Se ha evitado crear un espacio completamente cerrado y aislado del entorno

La solución adoptada incluye «un sistema de láminas que protege al usuario en la cancha de las inclemencias del tiempo, a la vez que permite una ventilación y visibilidad perfectas».

Con esta primera acción de techado «se aumenta la funcionalidad de la instalación deportiva existente, de 1.432 metros cuadrados, facilitando su utilización en torneos federados, actividades de formación o uso lúdico y libre, con independencia de las condiciones meteorológicas de lluvia o calor excesivo. Además, los trabajos han permitido ganar otros espacios para su uso complementario y marcan el rumbo de otros techados que el Ayuntamiento ya tiene en marcha en canchas de Guía, San Antonio o Fuente del Lomo».