Santa Cruz prueba un proyecto de «buena vecindad» con las personas sin hogar

El Consejo Rector del IMAS decide prorrogar dos años más el primer plan destinado a la atención de estos ciudadanos, con una inversión anual de más de 3,3 millones de euros

El alcalde de Santa Cruz (centro), la edil de Atención Social (derecha), y varios usuarios del albergue municipal.

El alcalde de Santa Cruz (centro), la edil de Atención Social (derecha), y varios usuarios del albergue municipal. / E. D.

Santa Cruz de Tenerife probará un proyecto de «buena vecindad» con las personas sin hogar. Se trata de una iniciativa «pionera y novedosa» con la que el Ayuntamiento persigue mejorar la convivencia entre estos ciudadanos, algunos de los cuales duermen en la calle y otros en recursos municipales, y los vecinos de la capital, fundamentalmente, con los que residen en el entorno del Centro Municipal de Acogida, conocido como albergue y situado en la calle Valle Inclán. Así lo anuncia la concejala responsable del IMAS (Instituto Municipal de Atención Social), la nacionalista Rosario González, quien destaca que el principal objetivo de este proyecto es que, a través de diferentes acciones, se cree una adecuada relación entre los vecinos y las personas sin hogar.

Para ello, y con una inversión inicial de 15.000 euros, se llevará a cabo una «intervención comunitaria» en el entorno del Centro Municipal de Acogida, con las personas sin hogar y con los vecinos. «La idea es que se establezca una buena vecindad; que mejore la convivencia; que mejore la imagen y la limpieza de la zona; que los usuarios de los recursos municipales sean más responsables con los espacios que les rodean; y que los vecinos conozcan las problemáticas y situación de estos ciudadanos. En definitiva, que todos entendamos que todos somos vecinos y que debemos esforzarnos para que la convivencia sea la mejor posible», asevera González.

Entre las acciones previstas se encuentran el «trabajo de zona» que realizarán los profesionales; la celebración de encuentros entre los usuarios de los recursos municipales y los residentes; y la celebración de charlas y actividades.

La Asociación de Vecinos Azorín se ha quejado en numerosas ocasiones de la «falta de limpieza en la zona y de la sensación de inseguridad que se sufren en la misma», solicitando también que se abran más albergues en otros municipios de la Isla. En este entorno también se encuentra el polideportivo Pancho Camurria, junto al cual existe un asentamiento de chabolas. El Ayuntamiento ha decidido, tal y como informó ELDÍA, vallar los accesos a la instalación deportiva y reforzar la presencia policial «ante los problemas de convivencia detectados».

La anunciada iniciativa de «intervención comunitaria para lograr una buena vecindad» se enmarca en el I Plan de Personas sin Hogar, cuya prórroga, durante dos años más, fue aprobada esta semana por parte del Consejo Rector del IMAS. La edil explica que se ha tomado la decisión de prorrogar este primer plan porque «sigue siendo un documento válido para orientar las políticas públicas de atención a este colectivo y porque aún quedan acciones pendientes de desarrollar, como el proyecto de vecindad».

La prórroga de este plan supone que el Ayuntamiento seguirá invirtiendo al año más de 3,3 millones de euros para atender a estos ciudadanos. En este plan están incluidos, por ejemplo, los Pisos Housing, con la inclusión de diez viviendas gestionadas por Hogar Sí y Provivienda; el programa de atención a jóvenes de Don Bosco, o los servicios funerarios para personas en alta exclusión.

Según los datos facilitados por el Instituto Municipal de Atención Social, el año pasado fueron atendidas por los recursos del Consistorio chicharrero 487 personas sin hogar, de las que 422 «se encuentran en el Centro Municipal de Acogida, pisos de atención, Centro de Mínima Exigencia y asentamientos, entre otros recursos municipales». El resto, 65 ciudadanos, fueron atendidos en la calle.

González recuerda que el I Plan Municipal para la Atención de las Personas sin Hogar en Santa Cruz fue aprobado por unanimidad en el pleno del Ayuntamiento en febrero de 2019, con una vigencia de cuatro años. Para la elaboración de este documento se contó con la participación de una muestra de un total de 200 usuarios de los servicios residenciales y no residenciales, además de las aportaciones de técnicos que trabajan con el colectivo y la visión de los integrantes de la Comisión Técnica de Personas sin Hogar.

Objetivo

«El objetivo de este plan es dar una respuesta adecuada a los nuevos retos que se presentan, como la aparición de nuevos perfiles de personas sin hogar, que exigen un tratamiento diferenciado de los mismos; el incremento y la cronificación de los casos por la falta de oportunidades para la reinserción social; y la notable limitación de la capacidad de transferencia de la población acogida en los centros, que «amenaza con colapsar el servicio a medio plazo». La responsable de Atención Social insiste en que este plan sigue siendo un documento válido para orientar la atención a estos ciudadanos y, por eso, «lo hemos prorrogado».

Aprovecha para recordar que entre los recursos existentes en Santa Cruz se encuentran el Centro Municipal de Acogida, que supone un gasto anual de 2,2 millones de euros; los Pisos Housing; los Pisos para Jóvenes de Don Bosco; los servicios funerarios; las acciones de intervención sanitaria con Médicos del Mundo; los pisos de emergencia para familias monoparentales de Nuevo Futuro; y los pisos de emergencia para familias con la Asociación Provivienda.

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