Fiestas de Mayo | Exposición de Luis Dávila

Santa Cruz presume del legado de Luis Dávila, un ‘chicharrero de corazón’

La sala García Sanabria del parque acoge más de 140 láminas y setenta muñecas del prestigioso diseñador que resume medio siglo de entrega por mimar la vestimenta

Humberto Gonar

Humberto Gonar

«Aquí está el espíritu de Luis». Así de contundente se mostró el consejero de Empleo, Educación y Juventud del Cabildo de Tenerife, Efraín Medina, en la inauguración de la exposición que Santa Cruz dedica al prestigioso diseñador y costumbrista Luis Dávila (La Laguna, 1946-2023). Con el ímpetu de quien pontifica sin miedo a equivocarse y la anuencia de los casi dos centenares de personas que desbordaron en la tarde de este martes la sala de exposiciones García Sanabria que se localiza en el parque del mismo nombre, en la zona más próxima a la rambla de Las Tinajas, Efraín Medina reiteró el agradecimiento al desvelo que mostró el artista lagunero más allá de Carnaval y que hizo posible la creación del Consejo Sectorial de la Indumentaria Tradicional de Tenerife. «Luis fue su alma», puso en valor el consejero.

No había llegado la hora de inicio de la inauguración y llamaba la atención la nutrida presencia de familiares, amigos y, en particular, amantes de la tradición y del protagonista de la muestra. 

La primera en intervenir, Dulce Rodríguez de la Rosa, estudiosa de la vestimenta tradicional y miembro del Consejo Sectorial de la Indumentaria Tradicional del Cabildo Insular de Tenerife pero, sobre todo, una enamorada y entusiasta de la obra de Luis Dávila, y gran valedora de su legado junto a Pablo Afonso, los promotores de la muestra que sirve de avanzadilla a la exposición de flores y plantas del García Sanabria, que abre este miércoles.

Dulce Rodríguez es capaz de traducir a palabras la obra del maestro Dávila. «De la misma forma que se habla de los magos y magas de Guezala, tenemos aquí los magos y magas de Dávila». En esa idea ahondó también el consejero insular Efraín Medina, quien dijo que de la misma que se toma de referencia a otros expertos de la vestimenta, Luis Dávila ha sentado cátedra. Y reiteró con orgullo y sentido de pertenencia, como quien le va la vida en ello: «aquí está la esencia de Luis», después de agradecer al Ayuntamiento de Santa Cruz, tanto al alcalde como a los concejales de Fiestas y de Distrito Centro que hayan hecho posible esta muestra.

La muestra, abierta esta semana por la mañana los festivos y también las tardes del jueves y sábado

Dulce deleitó con su verbo las figuras pintadas por Dávila en las láminas con su característica elegancia y cargada de detalles, para poner en valor otra faceta del artista como escultor a la hora de realizar muñecas en corcho blanco o en papel maché, tela... para luego realizar a escala cada elemento de la vestimenta con los materiales originales, ya fueran lana, lino, bordado...

Cuando se le plantea a Rodríguez de la Rosa que destaque la joya de la exposición no lo duda: «el conjunto; es Luis Dávila». «Su manera elegante, ser riguroso, las figuras estilizadas que pintaba como si fueran diosas griegas, ya fuera un diseño de Carnaval o un vestido tradicional». Y aporta otra clave para descubrir la identidad el Dávila: «solía pintar en la cara de sus trazos perfectos un solo jo, como si fuera una firma, una muestra mas de su elegancia con el respeto al colorido de los tejidos de los siglos XVIII y XIX». No perdió la oportunidad la propia Dulce para recordar que «Luis nació en La Laguna pero... es un chicharrero de corazón». Y es que en sus palabras hacia el artista siempre utilizó el presente. Como si estuviera presente en la sala.

El concejal de Fiestas, Javier Caraballero, hizo partícipe del exquisito resultado de la muestra al esfuerzo de su compañera Purificación Dávila, responsable del Distrito Centro, y de Santiago Díaz, de Cultura, que aporta la sala. «Poco hay que decir de Luis Dávila: ilustrador, diseñador... artista que lo dio todo en el diseño», para destacar su faceta tanto como estudioso e investigador como divulgador de la vestimenta tradicional. Y ahí fue donde presumió de poner en mayúsculas un legado que saca de los fondos de armario para distinguir estas Fiestas de Mayo.

Tras las palabras emotivas de Efraín Medina, embajador de la vestimenta tradicional en corresponsabilidad con el consejo sectorial, tomó la palabra el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, quien con generosidad agradeció el empeño de Dulce Rodríguez de la Rosa y de Pablo Afonso por hacer realidad esta muestra, y a los que llegó a definir como inspiradores, para deslizar que, «de alguna forma, la capital salda esta deuda que tenía con el artista».

Sin reivindicar el Carnaval, el alcalde mostró el dominio de la fiesta al recordar que Luis Dávila entregó medio siglo al diseño –tanto de la fiesta de la máscara como de mayo y las tradiciones– para reivindicar que fue el autor de tres trajes de reinas de Carnaval.

Más allá del sentido estético, Bermúdez elogió la defensa de la identidad canaria, y el detalle, como le sorprendió que en una de las láminas se explique cómo se hace un botón del traje de maga, un legado con el que reivindicaba el respeto por la vestimenta tradicional, como quien marca el terreno del disfraz para Carnaval y el traje típico para la cita tradicional.