Hoteles llenos y puestos sin cubrir a siete días de la Semana Santa

La patronal contesta a la petición de Clavijo de subir los sueldos en el sector: «Nuestro convenio es el segundo más caro de España»

Turismo refuerza en Semana Santa su apuesta por los residentes canarios que distribuyen mejor el gasto y diversifican la oferta

LP/DLP - ED

Néstor Santana

Néstor Santana

Con los hoteles a punto de colgar el cartel de completo de cara a la Semana Santa, la necesidad de contratar personal se ha disparado. Los empresarios turísticos buscan trabajadores ante el boom de visitantes que espera el Archipiélago entre el próximo 24 y 31 de marzo, pero la tarea, que de primeras parecía pan comido, se ha convertido en misión imposible. Si bien 196.400 isleños están en paro, pocos se ofrecen para ponerse el delantal en este sector con déficit de mano de obra.

El principal escollo es la falta de viviendas en los núcleos turísticos y el alto precio de los alquileres, a los que pocos asalariados pueden hacer frente con un sueldo medio en las Islas de 1.573 euros mensuales. A este problema se refirió la pasada semana el presidente del Archipiélago, Fernando Clavijo.

Durante su discurso de apertura del Debate sobre el estado de la nacionalidad en el Parlamento autonómico, pidió a la patronal una subida de sueldos como «primer paso» para hacer «partícipes» a «toda la sociedad» de su récord de facturación, que en 2023 rompió techo con 22.000 millones de euros. ¿Pero qué piensan los empresarios de la propuesta? ¿Están dispuestos a ello?

El presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo (FEHT) de Las Palmas, José María Mañaricua, defiende que el convenio colectivo de los trabajadores de la hostelería en la provincia oriental es el segundo más caro de España tras Baleares. Antes de los salarios del sector turístico, replica al presidente, se deberían revisar los de otros sectores. En concreto, señala el de las limpiadoras de la Cámara autonómica, que cobran el salario mínimo –1.134 euros mensuales– frente a las camareras de piso de un hotel de cuatro estrellas, cuya retribución es de 22.500 anuales.

Tampoco ha sentado bien la reclamación de Clavijo a la patronal de la provincia occidental. El presidente de la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Santa Cruz de Tenerife (Ashotel), Jorge Marichal, recalca que los empresarios ya trabajan para que la distribución de la riqueza sea efectiva, así como para atraer a la mano de obra, más cuando esta se ha convertido en un bien tan preciado y escaso.

Lanzarote es una de las islas donde más cuesta a los hoteleros encontrar empleados. Y con una tasa de paro del 16,19% en la comunidad, la presidenta de la Asociación Insular de Empresarios de Hoteles y Apartamentos Turísticos de Lanzarote (Asolan), Susana Pérez, subraya que es trabajo del Gobierno de Canarias impulsar la incorporación de los desempleados al mercado laboral, además de analizar por qué ocurre esta paradoja. El déficit es tal que el Hotel Barceló Playa Blanca se ha lanzado a ofrecer 500 euros a los empleados que traigan a amigos, familiares o conocidos para unirse al equipo. «Es una medida puntual. Abrimos el complejo hace dos meses, esperamos una ocupación alta en Semana Santa, y necesitamos 100 trabajadores más», explica el director de área de los Hoteles Barceló en Lanzarote, Ismael Descalzo. Aun con la promoción, apunta que no cubrirán todos los puestos pendientes, pero al menos sí una buena parte para hacer frente al récord de ocupación que se avecina.

Sin embargo, los sindicatos no ven estos incentivos con los mismos ojos. La Federación de Servicios de Comisiones Obreras (CCOO) en Canarias acusa al hotel de apostar por la «limosna» en vez de destinar parte de la infraestructura al alojamiento de trabajadores. Algo que, remarca, potenciaría el compromiso de permanencia en la empresa. «Esto demuestra que los empresarios siguen invirtiendo en Canarias por sus altas rentabilidades económicas y no con vistas a las necesidades sociales y laborales de la población trabajadora», explica CCOO en un comunicado.

La capital lanzaroteña es el punto residencial con mayor oferta alojativa para la población local, por lo que en los núcleos turísticos colindantes, como Costa Teguise, la dificultad de los trabajadores para encontrar casa no es tan acuciante. En cambio, Playa Blanca se encuentra a 35 minutos en coche y a una hora y ocho minutos en transporte público de Arrecife, lo que obliga a los empleados de hoteles y restaurantes a buscar cobijo por la zona. Si se toma como referencia el sueldo medio en Canarias –1.573 euros–, que viene determinado por el sector turístico, ya que emplea a cuatro de cada diez asalariados, y se tiene en cuenta la recomendación de destinar al alquiler como máximo el 30% de la paga, se puede entender la gravedad del asunto.

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