Seguridad | Una propuesta para mejorar las actuaciones en un desastre natural

Drones para informar a los afectados de un desastre sobre sus propiedades

Las emergencias estudian el uso de estos dispositivos para calmar a los damnificados

La idea parte de la experiencia de I Love The World en la erupción de La Palma

Imagen tomada por un dron de los daños causados por el reciente incendio de Tenerife en la Corona Forestal.

Imagen tomada por un dron de los daños causados por el reciente incendio de Tenerife en la Corona Forestal. / I LOVE THE WORLD

Eduardo Cabellos

Drones para informar sobre el estado de las propiedades a los afectados en situaciones extremas como incendios o erupciones. Es la medida que plantea Alfonso Escalero, director de la productora audiovisual I Love The World, para introducirla en los protocolos de atención a los evacuados. Esta tecnología ya fue utilizada con ese fin por el propio Escalero, de forma particular y sin que estuviera contemplada en el operativo de emergencia, durante la erupción del volcán Tajogaite en La Palma, cuyo inicio cumple mañana dos años. Y es que la versatilidad de estos dispositivos aéreos y sus imágenes y vídeos panorámicos aportan detalles muy precisos sobre la situación de las propiedades públicas y privadas dañadas o amenazadas por los desastres naturales.

Tras el despliegue realizado en el reciente incendio de la Corona Forestal de Tenerife por Airmedia 360, empresa nacida en La Orotava y especializada en utilizar, alquilar o fabricar drones profesionales, y la propia I Love The World, los operativos se plantean incluir estos drones en futuras emergencias, no solo para dar información sobre la situación del desastre –para lo que ya se utilizan–, sino también para dar servicio por primera vez a los damnificados –lo cual sería una novedad–.

Los apoyos a esta propuesta de Escalero no han tardado en llegar. Rosa Dávila, presidenta del Cabildo de Tenerife, y el tinerfeño Federico Grillo, director técnico de emergencias del Cabildo de Gran Canaria y experto en incendios, confirmaron en sus redes sociales que se está trabajando en ello. «Seguiremos avanzando e incorporaremos nuevos medios para llegar a la población con una información transparente», detalló la presidenta insular, al tiempo que Grillo aseguró que «debemos ser aún más sensibles con los ciudadanos evacuados en emergencias para conseguir una gestión de la comunicación cada vez más moderna».

Alfonso Escalero. | | E.D.

Alfonso Escalero. / El Día

La reunión con Grillo

Alfonso Escalero recuerda que el primer contacto que tuvo con Grillo fue porque este le pidió permiso para utilizar una foto de 360 grados, que había sacado en el último incendio de Tenerife, con un fin divulgativo para sus alumnos de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Más adelante, y como confirmó Federico Grillo en sus redes sociales, él y Escalero mantuvieron una charla en la que se planteó incluir los drones en los protocolos de asistencia a los afectados.

Las principales opciones que se manejan es incorporarlos para ayudar en casos donde los helicópteros no puedan actuar, ya sea por la noche o en otras situaciones de baja visibilidad. También se contempla compartir fotos y vídeos para informar a la población afectada y evitar el estrés de la incertidumbre, que empeora una ansiedad ya de por sí máxima por tener que abandonar sus hogares. «Pido protocolarizar el uso de drones para desastres como un incendio o una erupción y que se contrate a profesionales. No quiero estar en esto, sólo doy la idea», deja claro Escalero.

El responsable de I Love The World descubrió esta idea de casualidad durante la erupción de La Palma, cuando acudió a la Isla Bonita a cubrir la catástrofe. Observó que la forma de prever las rutas por donde podía discurrir la lava eran imprecisas: «Fui a ver cómo estaba la zona afectada por el volcán y levanté un dron. A los días de publicar las imágenes en las redes, cientos de palmeros empezaron a contactarme para que les enseñara la situación de las zonas donde estaban sus propiedades». La demanda fue a más de forma instantánea. Al detectar que la información que ofrecía el operativo oficial no era certera, se propuso ayudar a estas personas, aunque supusiese un enorme esfuerzo. «La gente que corre el riesgo de perder sus posesiones necesita tener información exacta. Hay mucho en juego. Entonces me puse manos a la obra», revela Escalero.

«Todos me decían que no podían vivir con la incertidumbre de desconocer cómo estaban sus hogares, sus fincas, los terrenos de sus familiares, todo por lo que tanto habían luchado. Necesitan datos, aunque como ocurrió en La Palma en muchos casos fueran negativos», comenta Escalero. «La historia se repitió en el incendio de la Corona Forestal», puntualiza. Los mensajes de los afectados pidiendo imágenes sobre sus propiedades se acumulaban en el teléfono móvil de Alfonso Escalero.

Los inconvenientes

Se multiplicaban los pedidos pero también los inconvenientes. Este servicio no está contemplado en los manuales y los técnicos ponían pegas, como que los drones podían afectar a los helicópteros. «En un incendio con 90 kilómetros de perímetro podíamos coordinarnos a la perfección para no afectar a las aeronaves y poder calmar la ansiedad de los evacuados». El resultado fue que no le dejaron volar los drones sobre las zonas habitadas.

Los drones de I Love The World habían sido los ojos de cientos de palmeros afectados por el volcán. Pero en realidad Alfonso Escalero no fue el primero que desplegó este servicio humanitario. El primero que lo puso en marcha fue un agricultor de Tazacorte llamado Antonio Carrillo. Este hombre utilizaba un pequeño dron que le regalaron en su cumpleaños para controlar sus fincas. Cuando estalló el volcán, un vecino le pidió que lo echara a volar para ver cómo estaba su casa. Ahí empezó todo. Le retiraron el aparato al carecer de permiso, lo que provocó una rebelión en su apoyo de los vecinos. Finalmente pudo recuperar el dron previo pago de una multa de 90 euros.

El avance de la tecnología permite que se pueda emplear en ámbitos como la prevención y la seguridad. Según asegura Alfonso Escalero, en Gran Canaria ya tienen un prototipo de dron que incluye un potente depósito de agua, unos dispositivos que son mucho más baratos que cualquier helicóptero. De momento, no apagan incendios pero pueden ayudar a que los operativos contraincendios sean más eficaces. Y, sobre todo, a mantener informados a los afectados sobre cómo se encuentran sus propiedades. La experiencia de La Palma puede ser muy útil. Administraciones como los cabildos de Tenerife y Gran Canaria ya lo estudian.