Buenas sensaciones en la primera cita con la mediadora del tranvía

Mónica Molina causa «una impresión positiva» en los trabajadores, dispuestos a suspender los paros si reciben garantías jurídicas

Usuarios esperan el tranvía en la parada de Weyler, en Santa Cruz.

Usuarios esperan el tranvía en la parada de Weyler, en Santa Cruz. / CARSTEN W. LAURITSEN

La primera jornada de tarea de Mónica Molina, la mediadora propuesta por el Cabildo de Tenerife para solucionar el conflicto laboral en el tranvía, se salda con resultado positivo. La experta abogada mantuvo ayer un encuentro en la sede de las cocheras de la parada de El Cardonal con el comité de empresa de Metrotenerife a la que finalmente no acudió la consejera insular de Movilidad, Eulalia García, ya que solo estaban convocados los representantes legales de la plantilla de 202 empleados.

La intención de Molina es reunirse con todas las partes implicadas, tanto por separado como conjuntamente en base a un cronograma que continúa hoy con la segunda cita. Los trabajadores aseguran estar dispuestos a «suspender» los paros indefinidos actuales en tres tramos horarios de la jornada laborable, si reciben «garantías jurídicas» para el cumplimento posterior de lo pactado por parte de la compañía de transporte público dependiente de la corporación insular. La intención si eso se produce es «continuar las negociaciones luego antes de desconvocar la huelga de forma definitiva».

Ese documento que garantice «el valor del acuerdo» entienden que debe estar avalado por el Tribunal Laboral Canario u otro organismo similar, previa intervención de la mediadora. No quieren que se repita lo que, desde su óptica, ocurrió tras el final de la huelga anterior, el 26 de junio de 2023 «cuando se firmó un documento para resolver el conflicto y se quedó en papel mojado porque prácticamente no han cumplido nada». La empresa, por contra, defiende que «se ha cumplido con el 75% de l pactad y el otro 25% depende de lo que se negocie con el comité de empresa».

Mónica Molina solicitará un informe a la Mutua de Metrotenerife y a Inspección de Trabajo sobre cómo afecta el polvo de sílice a quienes estén expuestos a este elemento cancerígeno que se usa para el frenado de los tranvías. Eliminarlo es una de las principales peticiones de los trabajadores.

La mediadora pretende sentar hoy mismo a todas las partes a la misma mesa. De Inspección de Trabajo a la Mutua y de la dirección de la empresa a los delegados sindicales de Prevención.

Aparte del polvo de sílice, el comité de empresa centra sus argumentos en el Departamento de Recurso Humanos. Por ejemplo, explican fuentes de los trabajadores, «no coincidimos en el número de compañeros que podían acogerse a la consolidación de puestos del Cabildo tras muchos años como interinos, Contamos al menos catorce y el jefe del departamento dio un listado de solo cinco». Por otro lado, «firmamos en el acuerdo para desconvocar la huelga que se reforzaría el área. Sale una plaza de abogado y en lugar de ir lo ponen Administración». Tampoco están de acuerdo en «sanciones a compañeros recién incorporados que consideramos injusta». Solicitan «que se de marcha atrás y se anulen».

La mediadora tiene la voluntad de desbloquear el conflicto laboral en el tranvía de Tenerife lo antes posible. Los trabajadores parecen dispuestos a ceder a cambio de las garantías jurídicas mencionadas. Movilidad del Cabildo demuestra su interés en que todo vuelva a la normalidad con la propuesta de Molina. Y la empresa tiene la oportunidad de mostrar un talante negociador. Se unen los factores para decir que la huelga puede solucionarse pronto.

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