Mujeres senegalesas se instruyen en técnicas agrarias en Tenerife

Un proyecto de la Universidad de La Laguna, apoyado por el Cabildo, crea un puente entre el mundo rural isleño y Senegal

Las mujeres senegalesas durante su estancia de una semana en la Isla.

Las mujeres senegalesas durante su estancia de una semana en la Isla. / El Día

Mujeres, africanas y agricultoras aprenden técnicas del campo en Tenerife. Y viceversa. Un proyecto transnacional de la Universidad de La Laguna (ULL), con el apoyo del Cabildo y de la Universidad Gaston Berger, ubicada en Saint Louis (Senegal), establece un puente entre el mundo rural isleño y el del país francófono del continente negro, precisamente de la zona cuyo puerto suele ser punto de partida de los cayucos llenos de migrantes hacia Europa, a través de la denominada ruta canaria.

Agrofem es el acrónimo de la iniciativa Interreg-MAC con fondos europeos Feder, ya concluida, y llamada oficialmente Comercialización y puesta en valor de los productos agrícolas de Canarias y Senegal mediante el empoderamiento de las mujeres de las cooperativas de cada región y el intercambio de experiencias. Al hacer balance, sus promotores hablan de éxito al lograr el objetivo.

Tres investigadores de la ULL, entidad jefa de fila –como se denomina– de la iniciativa estuvieron implicados en este proyecto. María del Carmen Marrero y José Manuel Cruz, del Departamento de Filología Clásica, Francesa, Árabe y Románica, y Manuel Antonio González, de Ingeniería Agraria.

Carmen Marrero explica que "nació en 2019, pero tuvimos un parón por la pandemia de la covid-19 y se nos concedió una prórroga hasta terminar, a finales de 2023". La investigadora principal del proyecto subraya que "se pretende realzar tanto el valor y el trabajo de las cooperativas de mujeres de Senegal como el de las emprendedoras rurales de Tenerife", colaboradoras en esta iniciativa.

Ida y vuelta.

Una experiencia de ida y vuelta con actividades formativas, tanto en las instalaciones de la Sección de Ingeniería Agraria de la propia Universidad tinerfeña como en Senegal. La acción sirvió para empoderar a unas cuarenta mujeres africanas, enseñarles estrategias de comercialización de sus productos y la modernización de la actividad cooperativa. Contó con una financiación de 353.000 euros. En tierras africanas tomaron parte 19 mujeres locales durante el trabajo desarrollado en tres cooperativas en el entorno del principal río de la zona. En Tenerife, la embajada estuvo compuesta por diez mujeres, una profesora del equivalente allí al Instituto de Extensión Agraria y un docente de la universidad colaboradora. Fue más complicado que vinieran ellas por los trámites burocráticos, sobre todo la gran tardanza en obtener los visados. Las participantes potenciaron sus habilidades comerciales, además de mostrar un enorme interés por mejorar su modo de vida.

Cooperativas.

En Senegal, los tinerfeños trabajaron con tres cooperativas de mujeres Ross-Béthio, Thilène y Balacoss en el delta del río Senegal en Saint-Louis. Una, dedicada al arroz; otra, a las hortalizas, y una tercera, al procesado de cereales como sorgo, mijo o millo. Parte de la formación de este colectivo tuvo lugar en la propia escuela universitaria. Entre los resultados cabe destacar las estancias de dos doctorandos senegaleses en la Universidad de Laguna y otros dos de este centro académico que se desplazaron a Gaston Berger.

Red.

Un objetivo es dar continuidad a la idea para consolidar la red de cooperativas y empresas agrarias, así como configurar otra línea de guardianes de semillas con Senegal ampliando el radio de acción a Costa de Marfil y Mauritania. El balance es "positivo, pero insuficiente", debido a la alta demanda de las cooperativistas africanas, necesitadas de más herramientas formativas. De todo ello se publicarán este año dos trabajos de investigación. José Manuel Cruz indica que las implicadas han alcanzado mayor grado de autonomía en la gestión de las cooperativas. "Estas mujeres han roto todos los estándares, en una sociedad masculinizada y en un sector, el primario, en el que ellas no son protagonistas", afirma. Concluye: "Esta respuesta tan positiva nos hace seguir adelante, porque el compromiso trasciende lo académico".

Encuentro.

El encuentro entre agricultoras de las dos orillas se produjo a través de una feria auspiciada por el Cabildo de Tenerife en La Laguna, con experiencias compartidas en comercialización y en cómo anticiparse al cambio climático. El objetivo: establecer conexiones, promocionar mejor los productos y lograr más clientela. La decena de agricultoras de la región de Saint Louis participaron, a lo largo de sus ocho días de estancia en la Isla, en diversas actividades con las que adquirieron nociones sobre el desarrollo de la agricultura tinerfeña, así como nuevas técnicas, maquinaria y formas de trabajo en el sector. Todo en el marco de la iniciativa Agricultoras en Red, promovida por el Cabildo junto a la ULL dentro de Agrofem.

Experiencia.

Durante su estancia, las agricultoras senegalesas pudieron conocer la extensión de la actividad agraria liderada por mujeres en la Isla. De ahí su presencia en la Cooperativa Casmi de San Miguel de Abona, parada inicial del recorrido. Liderada por Ángela Delgado, la primera cooperativa de papas de Canarias sirvió de ejemplo comparativo a las mujeres africanas, habituadas a trabajar en el sector a través del asociacionismo y el cooperativismo. Pitaber, finca de pitayas en El Porís de Abona (Arico), fue otra de las empresas que las recibió. También pasaron por la Escuela de Capacitación Agraria de Tacoronte o la Finca La Quinta Roja, de Garachico.

Dos realidades agrarias muy diferentes de los socios de un programa cuyos ejes y prioridades son potenciar la investigación, el desarrollo tecnológico y la innovación. Un foro que fue espacio de intercambio de conocimientos y experiencias en materia de biodiversidad agrícola, con especial atención al papel fundamental de las agricultoras en el sostenimiento de los espacios rurales en ambos territorios.