Güímar proyecta un plan de actuación para el control del ‘rabo de gato’

Un diagnóstico previo permitirá planificar las medidas más adecuadas y las zonas de actuación

Güímar proyecta un plan de actuación para el control del 'rabo de gato'

Güímar proyecta un plan de actuación para el control del 'rabo de gato' / E. D.

El Ayuntamiento de Güímar ha encargado la redacción de un Plan de Actuación Municipal para el control de la especie Pennisetum setaceum, conocida popularmente como rabo de gato. Esta especie invasora ha ido colonizando diferentes entornos insulares, dando lugar a un problema de conservación que precisa de actuaciones específicas y coordinadas orientadas a su control.

La concejala de Desarrollo Rural, Nayra Caraballero, señala que el propósito de esta iniciativa «es realizar un conjunto de trabajos previos de investigación, consulta, inventariado y análisis para el establecimiento de estrategias de actuación». La edil güimarera explica que «se plantearán metodologías participativas que permitan establecer criterios comunes de actuación consensuados con diferentes sectores ciudadanos».

La primera parte del desarrollo de los trabajos consistirá en la elaboración de un diagnóstico participativo, a través de visitas de campo y la consulta a diferentes colectivos y especialistas en el control de especies invasoras, para obtener una valiosa información acerca de su situación actual, las medidas de control más adecuadas o el establecimiento de zonas prioritarias a la hora de proceder a realizar campañas de control sobre la especie, según informa el gobierno local.

Una vez obtenidos todos los datos y planteadas las propuestas técnicas y ciudadanas para el establecimiento de acciones orientadas a establecer medidas de control sobre la especie, «se procederá a la redacción del documento denominado Plan de Acción para el control de Pennisetum setaceum en el municipio de Güímar».

Nayra Caraballero, quien destaca la importancia de esta iniciativa para la conservación de la biodiversidad en el municipio, también hace referencia al impacto que esta especie tiene en los entornos rurales del municipio. Al respecto, la concejala de Desarrollo Rural hace hincapié en que «“muchos caminos agrícolas, huertas abandonadas y otros espacios están fuertemente colonizados por el rabo de gato». Desde la perspectiva de la también la segunda teniente de alcalde, «es relevante actuar sobre ellos porque estos entornos funcionan como puntos importantes de dispersión de la especie».