Oviedo-Tenerife, un pliegue en el tiempo

Real Oviedo y Tenerife se enfrentaron un 28 de abril de hace 33 años en Primera División. Ganaron los asturianos por 3-1.

Torrecilla y Gorriarán, en 1991.

Torrecilla y Gorriarán, en 1991. / El Día

Julio Ruiz

Julio Ruiz

No es la primera vez que Real Oviedo y Tenerife juegan un partido en Asturias un domingo 28 de abril. Ya pasó hace 33 años, pero en otra categoría, en Primera, y en otro estadio, el viejo Carlos Tartiere. Los visitantes, en su segunda temporada consecutiva en la Liga principal dentro de la memorable década de los 90, avanzaban hacia la permanencia situados en la mitad de la tabla. Los locales aspiraban a disputar la Copa de la UEFA. Los dos alcanzaron sus objetivos.

El encuentro se disputó a falta de siete jornadas para el final del calendario. A esas alturas, el Tenerife ya había estabilizado el rumbo bajo la dirección de Jorge Solari, sustituto de Xabier Azkargorta a mediados de enero de 1991. Tras un arranque irregular, el técnico argentino logró separar al representativo del peligro. De hecho, los blanquiazules viajaron a Oviedo reforzados por una racha de cinco victorias consecutivas. La serie se cortó en el Carlos Tartiere.

Ese día, todo salió mal. Quique Estebaranz llegó a fallar un penalti al borde del descanso cuando los de Javier Irureta ganaban por 2-0, gracias a un doblete de Janko Jankovic (27’ y 29’). En la segunda mitad, Felipe Miñambres recortó diferencias (70’) aprovechando un pase de Torrecilla, pero Luis Elcacho sentenció en el minuto 80.

Coincidiendo con el partido número 100 en Primera del Tenerife, Solari optó por una alineación formada por Manolo López, Torrecilla, Francis, Hierro, Toni, Revert, Llorente, Tata Martino, Toño Hernández, Estebaranz y Rommel Fernández. Participaron como sustitutos Miñambres y Bernal.

En el tramo restante del curso, el Tenerife solo ganó un partido más, al Valladolid en casa, con un gol de Rommel, el último del panameño con el club blanquiazul.

Solari defendió la actitud de sus futbolistas en Oviedo. «Nunca bajaron los brazos», afirmó tras una derrota que, en cierto modo, vio venir. «En cualquier momento toca perder», apuntó el Indio valorando la serie de siete jornadas sin perder, iniciada tras un 1-0 en el Nou Camp ante el Barcelona de Charly Rexach –gol de Stoichkov–.

Por historia, el tropiezo en el Carlos Tartiere no fue ninguna novedad. En sus trece visitas anteriores, iniciadas en el curso 61/62, el Tenerife solo había vencido una vez, por 0-1 –Antonio Illán– en la temporada 1976/77.

Pero la coincidencia de los dos equipos en Primera a lo largo de la década de los 90 alteró la tendencia favorable a los asturianos. Entre las Ligas 94/95 y 98/99, los tinerfeños ganaron cuatro partidos y atenuaron los precedentes.