Un derbi único en su especie

CD Tenerife y UD Las Palmas protagonizan este fin de semana la septuagésima edición del gran clásico canario por antonomasia. Será la segunda vez que sea en la Copa del Rey a partido único (la anterior fue en el curso 86/87) y el choque supondrá el vigésimo duelo entre ambos representativos en el marco del torneo del KO, donde los antecedentes sonríen al cuadro amarillo, que se impuso en diez de los encuentros entre ambos equipos en esta competición, con seis empates y un total de tres triunfos blanquiazules. No obstante, son varias las circunstancias que hacen de este clásico un derbi único en su especie, además cargado de alicientes de muy diversa índole.

En mejor categoría

La historia está repleta de situaciones como ésta, en las que dos equipos vecinos se midieron en la Copa desde categorías ligueras diferentes. Esta vez es Las Palmas la que llega en mejor ubicación tras la plaza en Primera conquistado el curso pasado; y que los de García Pimienta están defendiendo con aseados argumentos y conquistas de postín que les han posicionado en el hemisferio norte de la clasificación. En el recuerdo colectivo hay un clásico en el torneo del KO que disputaron ambos representativos desde divisiones distintas –entonces era el Tenerife el club de Primera– y la victoria sonrió en aquella ocasión al equipo que no era favorito. Con un inconmensurable Manolo López, fue la UD la que pasó de ronda.

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Cuota isleña

La participación de futbolistas isleños siempre fue un asunto recurrente en las fechas previas a este tipo de citas de máxima rivalidad. En ocasiones recientes fue siempre Las Palmas la que dio mayor carrete a los jugadores nacidos en el Archipiélago, pero la situación se ha equilibrado. En el Tenerife tienen opciones de jugar un grancanario como Jesús Belza y varios chicharreros, entre ellos su buque insignia Ángel y un jugador en franca progresión como Teto. Además, irán convocados con total seguridad otros canteranos blanquiazules.

Kirian y Moleiro

Se desconoce si tendrán participación relevante en el duelo de las nueve de la noche en el Heliodoro, pero su luz alumbra a Las Palmas y la potencia de sus respectivas historias merece un lugar propio en el relato de este clásico. Ambos pudieron lucir la blanquiazul pero el Tenerife les cerró el paso; ahora, obviamente, en las oficinas del representativo hay quienes se arrepienten de tan fatídica decisión y han puesto los cimientos de una nueva etapa en la política de captación y cantera. Kirian es «un jugador excepcional», adujo Garitano esta semana; y Moleiro, la gran duda. Acaba de salir de una lesión de clavícula y no está claro que tenga minutos.

Factor campo

Tras la controversia por los precios de las entradas, que causaron una «irritación y malestar» que la directiva local admite, la respuesta de la feligresía insular ha sido extraordinaria. Con la previsión de un lleno histórico, la afluencia de público del Rodríguez López podría rebasar límites insospechados y moverse en guarismos semejantes a los del último playoff que disputó el representativo, justamente con Las Palmas como rival en semifinales.

Experiencia

Nombres como los de Aitor Sanz (13 derbis) o Sipcic (siete) se presumen indispensables en cualquier apuesta que haga Garitano. Será suplente Soriano, que ha jugado seis, los mismos que Elady Zorrilla o Sergio González. José León, Mellot, Enric Gallego y Álex Corredera suma cinco; y el canario más avezado es Teto, con dos. Experiencias en la mochila para rendir y competir mañana al máximo nivel.