Turno para Tomeu Nadal en el CD Tenerife

El cambio de registro de la Liga a la Copa suele traer consigo una modificación segura en las alineaciones de cualquier equipo. Es el momento de los segundos porteros, de aquellos que normalmente no participan en la competición principal. En el Tenerife, el ejemplo está muy claro. Juan Soriano, que lo juega todo en Segunda –lo lleva haciendo desde que llegó al club en el verano de 2021–, descansará para que Tomeu Nadal coja su testigo en la eliminatoria de este miércoles con el Compostela. Será el estreno del manacorí en su primera campaña como blanquiazul.

Nadal, incorporado el pasado verano con un contrato de dos años de duración, participó por última vez en un encuentro oficial el pasado 27 de mayo. Lo hizo con su anterior equipo, el Real Oviedo, en la jornada de clausura de la Liga 22/23. Ese día no fue titular. Sustituyó en el descanso a Femenías.

Lo de ser el portero de Copa no es nada nuevo para él. Le pasó con el Oviedo en la 21/22 y en la 22/23. En cada una vivió las dos caras del torneo del KO, una derrota contra un rival de inferior categoría, el Andratx, y la oportunidad de caer con la cabeza alta ante el Atlético de Madrid. Antes, en su etapa como arquero del Nástic, también se especializó en la Copa. Entre otras cosas, vivió desde dentro un cruce con el Valencia en la 2013/14, resuelto con un gol de Alcácer después de 180 minutos de fútbol.

En el Tenerife, el papel secundario ha sido interpretado por guardametas como Javi Díaz (22/23), Dani Hernández (21/22), Ángel Galván (18/19), Carlos Abad (17/18), Ismael Falcón (16/17), Roberto (15/16, 14/15, 13/14 y 12/13)...

Ahora le llega el turno a Nadal, un profesional que no se conforma con ser suplente. Se centra en trabajar «a diario para estar preparado», tal como contó ayer en los canales de comunicación del club. «Estoy tranquilo con lo que estoy haciendo, y cuando pueda jugar, trataré de aprovechar esa oportunidad y disfrutar de ese momento», añadió con el deseo de dar ese paso en la visita al Compostela.

El balear le da un alto valor a esta competición, no solo por la oportunidad que brinda de poder coincidir en el camino con algún rival de Primera, sino por situaciones como la suya, la de un jugador que compensará su falta de protagonismo en la Liga con minutos en un partido oficial. «Eso es positivo para el grupo, porque es importante que todos tengamos rodaje en la competición y estemos preparados para entrar en cualquier momento en una temporada tan larga», argumentó Tomeu.

Desde su experiencia, considera indispensable poner «los cinco sentidos» en el campo para sacar adelante cualquier partido, sobre todo uno como el de este miércoles en San Lázaro ante un rival de Segunda RFEF. El exceso de confianza suele ser el peor enemigo para los que están obligados a clasificarse. «Si no lo haces, te puede ganar cualquiera», avisó. «Hay que salir a campo con humildad, a realizar el trabajo que venimos haciendo, a llevar a cabo la idea que quiere el míster y a intentar superar la eliminatoria», afirmó convencido de que será «muy importante seguir avanzando y alargar esta competición lo máximo posible». En definitiva, afirmó que el Tenerife tendrá que dar «el máximo nivel» ante el Compostela para no despedirse de la Copa. «Habrá que tener ilusión por pasar», dijo.