CD Tenerife

La historia (frustrada) del regreso de Pepe Mel al CD Tenerife

El club blanquiazul tenía decidido el regreso del técnico madrileño en caso de empate o derrota contra el Eldense

Apenas un puñado de personas en el club conocían los entresijos de la operación, que el protagonista casi confirma con una irónica respuesta

Pepe Mel.

Pepe Mel. / LaLiga

Manoj Daswani

Manoj Daswani

Esta es la historia de un fichaje frustrado por milímetros. Concretamente, los que bastaron a José León para hacer un gol definitivo (y que cambió el curso de los acontecimientos) en el Tenerife-Eldense del 19 de febrero. Pueden contarse con los dedos de una mano las personas que sabían qué ocurriría en caso de empate o derrota del representativo. No solo es que el cese de Asier Garitano fuese a tomar cuerpo aquella misma noche;es que además su relevo ya estaba decidido.

El nombre del sucesor ya no es ningún secreto. Iba a ser Pepe Mel (Madrid, 1963), que justamente ya había dirigido 27 partidos del representativo en la campaña 2000/01. Fue en Primera División, categoría a la que ha vuelto hace unos días con un estreno victorioso al frente del Almería, su nuevo club. Sobra decir que su contratación por parte de los rojiblancos desvanece completamente cualquier opción de que sea un candidato a regresar al Tenerife, pero el acuerdo de febrero existía. Tanto es así que Mel iba a viajar el martes por la mañana y ponerse el mono de trabajo esa misma tarde si hacía falta. Garitano tenía las horas contadas, pero le salvó –de forma mesiánica– el gol de León y a continuación otro más de Sergio González en la prolongación del Alcorcón-Tenerife a la semana siguiente.

Días después de que trascendiera esta operación, el máximo accionista del club se apresuró a desmentirla en una entrevista en Radio Marca.

«No me arrepiento de haber afirmado que no íbamos a echar al entrenador nunca. Creo que los proyectos se basan en la estabilidad. Ahora mismo el club tiene estabilidad societaria y económica y en lo deportivo también lo creemos así y la gente tiene que entenderlo. No es cierto que tuviésemos entrenadores apalabrados para sustituir a Garitano después del partido contra el Eldense. No nos hemos planteado el cambio de entrenador ni estando cerca del descenso», apuntó el inversor madrileño, que buscaba así fortificar a Asier, a quien ya prevé sostener hasta el final. Sus propias palabras quedan en entredicho con el testimonio del propio protagonista de la operación en la noche del lunes en El larguero de la SER.

Manu Carreño y Raúl Ruiz le preguntaron si había tenido otras ofertas antes de aceptar la del Almería. El madrileño respondió que sí;le insistieron si en un destino «donde hace buen tiempo», y también ofreció respuesta afirmativa. Y ya por último tiró de ironía cuando le preguntaron si era el Tenerife. «El Fuerteventura, ¿no? No seáis malos», replicó Mel, que no quiso ser más explícito porque el banquillo blanquiazul sigue teniendo dueño. Y porque en todo caso ya sus escarceos con el representativo son historia. La historia de lo que pudo ser y no fue.