Una menor denuncia a la pareja de su madre por abusos sexuales en Tenerife y esta le quita credibilidad

La Fiscalía mantiene la petición de seis años de cárcel

Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife

Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife / El Día

La madre de una joven que denunció haber sufrido abusos sexuales por parte de quien era entonces su pareja ha restado credibilidad a la denuncia de su hija pero tampoco se la da al acusado.

El procesado negó en la vista oral los hechos aunque reconoció que casi todas las noches estaba hasta las dos de la madrugada con la niña viendo películas en el salón, donde dormía ella, y cuando se mudaron a otra casa en la que la menor ya tenía habitación propia ocurría lo mismo y, según la madre, nunca vio nada raro en su comportamiento.

Primero ante una tía suya y luego en comisaría la joven denunció que su padre adoptivo le tocaba por debajo de la ropa e insistía en mantener relaciones sexuales y se ponía "muy agresivo".

La denuncia en Comisaría la presentó poco después de nacer su hermano, lo que el acusado y la madre atribuyen a que se sintió desplazada, tuvo celos y de hecho ni siquiera fue a ver al recién nacido al hospital.

"Siempre la cuidé como si fuera mi hija, jamás le puse la mano encima, me quedaba al lado de ella algunas noches porque decía que no podía dormir y que tenía miedo", declaró el acusado.

Dijo que era una joven conflictiva y que sus amistades no eran recomendables, por lo que atribuye la denuncia a la disciplina que intentó imponerle, "porque la madre le permitía todo", dijo.

La menor declaró que nunca llegó a denunciar lo que ocurría por miedo a que su madre se enfadara pero un día en medio de un enfrentamiento se lo dijo y la respuesta de ella fue que lo mejor era "empezar de cero".

Tras nacer su hermano "me armé de valor", ha afirmado, y junto con un amigo decidieron acudir a la policía, lo que dio lugar a la separación de los padres y a que se impusiera una orden de alejamiento respecto a la chica que le dio más seguridad.

La tía ante la que primero confesó lo que ocurría también asegura que nunca vio nada raro y que la relación entre ambos era cariñosa pero poco más.

La Fiscalía mantiene su petición de penas de 6 años de prisión y el pago de 3.000 euros como indemnización, mientras que la defensa sostiene la inocencia del acusado.