Entrevista |

El hombre que escondió 18 kilos de coca en electrodomésticos en Tenerife tenía una importante cantidad de dinero bajo tierra

Su expareja asegura que nunca sospechó que realizara una actividad ilícita

El hombre que escondió 18 kilos de coca en electrodomésticos en Tenerife tenía una importante cantidad de dinero bajo tierra

El hombre que escondió 18 kilos de coca en electrodomésticos en Tenerife tenía una importante cantidad de dinero bajo tierra / E. D.

La expareja del hombre al que se le intervino en Tenerife 18 kilos de cocaína escondidos en electrodomésticos, admitió este martes que en su momento observó como éste sacaba una cantidad importante de dinero en el interior de unas jardineras enterradas bajo tierra pero nunca sospechó de actividad ilícita alguna.

La mujer indicó que durante el año en el que mantuvieron esta relación sentimental pudo constatar que el procesado era adicto a la coca y alguna vez observó como hacía llamadas para conseguirla, por lo que le extrañó cuando le dijeron que traficaba con grandes cantidades.

En el interior de la vivienda había dos cajas fuertes, una importante cifra de dinero en efectivo que atribuyó a la venta de un piso y negó que su expareja mantuviera un alto nivel de vida, al menos con ella.

Ambos llegaron a crear una empresa relacionada con asuntos sanitarios a fin de que la hermana de la novia tuviera trabajo como médico cuando viniera de Venezuela pero finalmente la sociedad nunca funcionó porque no se fiaba de nadie, según manifestó la mujer.

Durante la vista que tuvo lugar este martes en la Audiencia Provincial tinerfeña, la Fiscalía defendió la legalidad de las escuchas telefónicas realizadas, al considerar que existían indicios suficientes de la comisión de estos delitos y de hecho se obtuvieron resultados, con lo cual descarta que fueran prospectiva, como mantuvo la defensa.

El Ministerio Publico relaciona al ahora acusado con el clan de s Nueve dedicado al tráfico de hachís, con quienes el procesado mantenía contactos cíclicos.

El abogado defensor dijo que las pruebas obtenidas eran nulas ya que no estaban justificadas, se ampararon en el procedimiento del clan de Los Nueve y las reuniones entre su cliente y los miembros este grupo no arrojaron resultado alguno por lo que sentenció: "El fin no justifica los medios".

Tras un receso el Tribunal determinó que estos argumentos serán estudiados cuando se redacte la sentencia y entonces se verá si se tienen o no en cuenta, lo que podría derivar incluso en la anulación de la causa.

Empresa sin actividad

La fiscal señaló que la empresa del detenido no tenía actividad ninguna, ni trabajadores, sólo contaban con varios vehículos a lo que se uniría el hecho de que el procesado llevaba tres años en paro, no cobraba prestación y mantenía un alto nivel de vida.

Un hombre se encuentra en prisión preventiva desde que fue detenido el año pasado cuando se le intervino un volumen de cocaína que podría alcanzar un valor de 625.000 euros.

El Ministerio público solicita para el procesado una pena de 9 años de prisión y el pago del triple del valor de la sustancia intervenida lo que sumaría 1,8 millones.

Otras penas accesorias serían la inhabilitación especial para llevar a cabo actividades comerciales relacionadas con la importación en Tenerife durante diez años, tanto en nombre propio como de su empresa. La defensa, por su parte, pidió la libre absolución al considerar que no hay pruebas definitivas en contra de su cliente.

Al acusado se le atribuye haberse venido dedicado desde hacía tiempo al tráfico de cocaína mediante la importación de electrodomésticos, tales como lavadoras o secadoras, en cuyo interior escondía la sustancia que luego era distribuida en el mercado ilícito.

La trama salió a la luz cuando al Unidad Operativa de Vigilancia Aduanera detectó el envío de estos aparatos de una forma sospechosa, figurando un destinatario ficticio con una dirección de Adeje, pese a que el acusado era quien iba a recibir el envío en su domicilio de Santa Cruz.

Por ello, se estableció un dispositivo de vigilancia en torno a una paquetería situada al lado de la empresa aduanera con el fin de descubrir el verdadero receptor del envío. Entonces los agentes de la policía nacional vieron como el procesado recogía cuatro bultos que se correspondían con dos lavadoras y otras tantas secadoras que cargó en una furgoneta propiedad de una empresa que figuraba a su nombre.

Cuando el sospechoso se disponía a salir de la empresa de envíos fue interceptado por la policía quienes intervinieron en el interior de los electrodomésticos, once paquetes de bloques homogéneos de una sustancia que resultó ser cocaína.

Alijo

En concreto se hallaron 14 tabletas que pesaban 14 kilos y tenían una pureza de 78,5%, cinco de cinco kilos con el 79,28%, dos con dos kilos y 78,6% y una más de un kilo y pureza de 78,31%. En el momento de la detención al acusado se le intervinieron también 575 euros en efectivo y un teléfono móvil.

A continuación se llevaron a cabo registros en los domicilios que tenían vinculación con el detenido, encontrándose 26.000 euros en uno de Adeje, 7.775 en otro de Santa Cruz y 60.000 que estaban en poder de su hermana, además de diversos efectos relacionados con esta actividad ilegal.