El CD Tenerife suspira por un rival de campanillas en el sorteo copero

El CD Tenerife conocerá el próximo martes a su próximo contrincante copero, que será con casi total seguridad un rival de la máxima categoría. Una de las opciones sobre la mesa es que haya derbi, que podría celebrarse el día de Reyes. El primer fin de semana de 2024 es el momento elegido para la disputa de la tercera eliminatoria, para el conjunto blanquiazul llena de alicientes. Por un lado, porque el consejo de administración espera hacer una gran taquilla; y por el otro, porque para la afición del Heliodoro será un excepcional regalo navideño después de casi tres años completos sin un cruce oficial contra un Primera.

La última vez con un Primera

Estaba Luis Miguel Ramis al frente del banquillo y el rival fue el Villarreal. El partido se disputó el 17 de enero de 2021 y lo resolvió un gol postrero de Fer Niño (90') en un Rodríguez López casi lleno. Al submarino amarillo lo entrenaba Unai Emery y el técnico local optó por dar cabida a muchos presuntos titulares en el once copero. Desde entonces, la competición del KO ha vuelto solo una vez al Heliodoro, en diciembre del mismo año, pero el adversario era de Segunda (el Eibar).

Un recuerdo feliz

Más atrás en el tiempo hay que irse para hallar un triunfo blanquiazul ante un contrincante de superior categoría. Fue frente al Valladolid en el curso 2019/20 y con Rubén Baraja en el banquillo. Justamente el impulso que le dio al Tenerife la Copa del Rey se trasladó a su rendimiento en la competición liguera, donde el representativo traía flojera y malas sensaciones. El cuadro isleño batió al pucelano y a continuación tuvo el premio de recibir en la Isla al Athletic Club. También estuvo cerca la eliminación de los leones en un duelo que aún se recuerda por la ovación del Heliodoro a Williams, por entonces fustigado por ataques racistas que había recibido días atrás en Montjuïc.

Tradición copera

No siempre fue así, pero el Tenerife firmó largas y exitosas trayectorias coperas en años donde también le fue bien en la liga. El ejemplo más brillante es el de su incursión en las semifinales del torneo con Valdano en el banquillo. Entonces apeó al Real Madrid en una eliminatoria memorable de cuartos, que se resolvió en el Bernabéu; y a renglón seguido recibió un severo correctivo del Celta en Balaídos en un choque marcado por las numerosas bajas (curso 93/94). En la década de los sesenta llegó a cuartos un par de veces, con desenlace infeliz en Sevilla (61/62) y ante el Atlético de Madrid (60/61); y lo mismo en los setenta con derrota en Zaragoza (75/76) y en los noventa con Heynckes, que vio caer a su equipo a manos del Atlético (95/96).

Las ventajas

Asier Garitano ha remarcado en numerosas ocasiones que se toma la Copa muy en serio, de ahí su apuesta por un once reconocible y competitivo en la cita de ayer en Riazor. El propio técnico vasco tiene buenas experiencias con el Leganés en esta competición que le permite rodar a los menos habituales en liga, al tiempo que brinda alegrías a aficionados y dirigentes. Todos tienen sus preferencias ante el venidero sorteo en Madrid, pero en todo caso pasar ya es un alegrón. Las imágenes de la celebración en la caseta atestiguan el subidón de energías positivas que significó el pase en las filas insulares. Fue el de ayer el partido 253 del Tenerife en Copa del Rey. Y habrá un 254. Si hoy no hay sobresaltos y se clasifican la mayoría de clubes grandes que hay en liza, un Primera vendrá a la Isla el mes que viene.