Sofá de piel como nuevo: Trucos para limpiarlo sin esfuerzo

Los sofás de piel son más duraderos y resistentes, pero requieren un mantenimiento más riguroso

Sofá de piel como nuevo: Trucos para limpiarlo sin esfuerzo.

Sofá de piel como nuevo: Trucos para limpiarlo sin esfuerzo.

Mantener tus sofás de piel impecables no solo requiere una limpieza adecuada, sino también cuidados constantes para preservar la calidad del material. Los sofás de piel no sólo son más duraderos y resistentes que los sofás de tela, también da un aspecto mucho más lujoso a la estancia en la que se encuentra. El inconveniente que tienen los sofás de piel es que pueden requerir un mantenimiento más riguroso y suelen ser más costosos que los elaborados con otro tipo de materiales.

¿Cada cuánto tiempo hay que limpiar un sofá de piel? Aunque la frecuencia exacta puede variar por el uso y el lugar en el que se encuentre, los fabricantes recomiendan limpiarlo al menos cada 6 a 12 meses para mantenerlo en condiciones óptimas. Si el sofá se usa con frecuencia o está expuesto a mascotas o niños, puede ser necesario limpiarlo con más regularidad.

Pasos para limpiar un sofá de piel

Lo bueno que tienen los sofás de piel es que con los cuidados adecuados y la limpieza regular pueden lucir como nuevos durante muchos años. Por este motivo te vamos a contar cuáles son los pasos que tienes que dar para mantener tu sofá como el primer día y los productos que debes utilizar para alargar su vida útil. Estos son los pasos para limpiar un sofá de piel:

  • Eliminar el polvo y la suciedad: lo primero que debemos hacer es retirar el polvo y cualquier otra suciedad que se haya acumulado en el sofá. Para ello, utilizaremos un paño seco y suave.
  • Limpieza: mezcla agua tibia con un poco de jabón suave y humedece un paño en la mezcla. Limpia el sofá con el paño y no te olvides de pasarle un paño seco para retirar la humedad.
  • Eliminar manchas: es muy importante tratar las manchas cuanto antes. Dependiendo del tipo de mancha, habrá que utilizar un poco de alcohol si es de tinta o bicarbonato si es de grasa, pero lo más importante es eliminarla cuanto antes.
  • Hidratación: la piel de los sofás necesita hidratación para mantenerse flexible y resistente. Aplica regularmente un acondicionador de cuero para mantener la piel nutrida y protegida.
  • Evitar el Sol: la luz directa solar directa puede causar decoloración y daños en la piel. Es preferible colocar el sofá lejos de ventanas y fuentes de luz directa.

En el mercado se pueden encontrar productos específicos que nos pueden ayudar a mantener los sofás de piel en buen estado. Estos son los más recomendados:

  • Limpiador de piel: busca un limpiador suave y específico para piel que no contenga productos químicos agresivos. Aplica el limpiador con movimientos circulares y luego limpia con un paño húmedo para eliminar los residuos.
  • Acondicionador de piel: después de limpiar el sofá, aplica un acondicionador de piel para mantenerla suave y flexible. Esto ayudará a prevenir la sequedad y las grietas en el material, manteniendo el cuero en óptimas condiciones.

La utilización de productos específicos para la limpieza de los sofás de piel ayudará a crear una barrera protectora que repelerá líquidos y evitará que la suciedad se adhiera al material.