Prioridad para el tren San Isidro-Adeje, que prevé 20 millones de viajeros al año

500.000 desplazamientos al día, la cercanía de puerto, aeropuerto u hospital y el nicho de empleo justifican el inicio del sistema por este tramo cuyo coste es de 800 millones

Infografía del tren del sur.

Infografía del tren del sur. / E.D.

El sistema ferroviario es una prioridad para el futuro de la movilidad en Tenerife Un objetivo «irrenunciable» del Cabildo que abordará para ello en primer lugar el proyecto del Tren del Sur, el más desarrollado de todos. Mejor dicho, lo retomará actualizado con una nueva declaración ambiental al haber caducado la anterior.

Además, lo abordará por fases. La primera, el tramo San Isidro-Adeje, que moverá 20 millones de pasajeros anuales con un coste de 800 millones de euros y cuatro años de obras –siete todo el tren– a partir del inicio, más otro para modificar el Plan Insular de Ordenación Territorial (PIOT) y otros trámites jurídico-administrativos. Así lo valoró la presidenta insular, Rosa Dávila, acompañada por el consejero de Presidencia y Planificación Territorial, José Miguel Ruano, durante el balance que ofrecieron respecto a la reunión mantenida el miércoles en Madrid con el Ministerio de Transportes.

La justificación de la prioridad de esta obra es múltiple. Desde los 500.000 desplazamientos diarios actuales en vehículo privado –el 93% de residentes– a su condición de nicho de empleo de la Isla o el hecho de tener cerca infraestructuras básicas como el Aeropuerto Reina Sofía, el puerto de Los Cristianos o el Hospital. Dávila y Ruano mantuvieron que el sistema ferroviario es la alternativa más sostenible para descongestionar puntos críticos al retirar vehículos de la carretera, reducir emisiones de CO2 y contribuir al objetivo europeo de la descarbonización.

La previsión es poner en marcha las obras del Tren del Sur durante el presente mandato (2023-2027). La presidenta enfatizó las razones para comenzar por este tramo: «Concurren una zona industrial como Las Chafiras, un aeropuerto internacional, el puerto de mayor tránsito de pasajeros de toda España o nichos de alta atracción de empleo». Valoró: «La intensidad en el uso nos colocaría como el segundo sistema de trenes más importante de España después de Madrid». Durante su intervención, recordó que el «tranvía de Tenerife en su día generó un debate intenso y, hoy por hoy, es un modelo de éxito en Canarias y en España». Esta idea se la habría trasladado el Ministro de Transporte y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, durante la reunión de esta semana.

Prioridad para el tren San Isidro-Adeje, que prevé 20 millones de viajeros al año

Prioridad para el tren San Isidro-Adeje, que prevé 20 millones de viajeros al año / José Domingo Méndez

Proyectos «paralizados»

Rosa Dávila lamentó el «tiempo perdido» a la hora de poner en marcha los proyectos ferroviarios de la Isla, ya que, según le trasladaron desde el Ministerio de Transportes, «desde 2019 no había recibido noticia alguna sobre la red ferroviaria prevista». La presidenta resumió en una frase: «Tenerife no puede perder el tren de la movilidad sostenible y hemos estado paralizados por el PSOE durante los últimos cuatro años». Ahora, insistió, «hemos podido retomar los proyectos que a partir de este momento tenemos lanzados».

Advirtió que será de forma conjunta con el Ministerio de Transporte, el Gobierno de Canarias y el Cabildo de Gran Canaria. Habrá financiación de todas las partes y la posibilidad de contar con fondos de la Unión Europea. Dávila subrayó que «los 4.000 millones de euros que cuestan los dos proyectos en las islas capitalinas no es dinero» para el Estado. Algunos datos son elocuentes. Por ejemplo que con sus más 22 millones de pasajeros, el tranvía de Tenerife tiene una intensidad de uso más de dos veces que la de los cercanías de Madrid y más de ocho respecto a los de Barcelona. Por tanto, valoró el proyecto como «rentable en términos económicos por la demanda, además de social y ambientalmente». Una alternativa «ecológica, fiable, segura y puntual» sentenció.

José Miguel Ruano tildó la reunión mantenida en el Ministerio como «un gran paso» e informó que desde Planificación Territorial y Movilidad «trabajamos coordinadamente para establecer los corredores viarios y las preceptivas declaraciones de impactos ambiental». Además, añadió, «estamos en condiciones de presentar un proyecto fuerte ante el Ministerio que cuente con el aval económico financiero más allá de los recursos europeos que se puedan obtener». El equipo de trabajo acordado entre el Ministerio y las instituciones canarias tiene previsto reunirse en abril. Está formado por el subdirector de Ferrocarriles, el equipo técnico de la Dirección General de Transportes, el consejero de Movilidad de Gran Canaria, Teodoro Sosa, y los de Tenerife Eulalia García y José Miguel Ruano.

Rosa Dávila valoró como factor «fundamental» para concluir la «unidad de las administraciones de todos los niveles y colores políticos» para afrontar «la única manera, a medio y largo plazo, de poder abordar una movilidad sostenible en Tenerife: apostar por los sistemas ferroviarios».