“Es como si estuviéramos en una cárcel sin barrotes”: la dramática situación de Hansi González, un tinerfeño atrapado en un hospital de México

Su familia pide ayuda ante el grave estado de salud de este vecino de La Orotava que había viajado al país azteca para visitar a su hija

Hansi González, junto a su mujer e hijas.

Hansi González, junto a su mujer e hijas. / El Día

D. Ramos

La familia del tinerfeño Juan José María González de Chaves Dreyer lanza un SOS desde México. Hansi, como es conocido, y su mujer, Carolina Martínez, viajaron el pasado 14 de marzo al país azteca para visitar a una de sus hijas. Un contratiempo de salud acabó convirtiendo aquella visita en una pesadilla: fue ingresado en un hospital privado y la factura, por quince días de tratamientos, se disparó por encima de los 90.000 euros. Sus familiares aseguran que el seguro que habían contratado antes del desplazamiento «no se quiere hacer cargo» de los gastos, lo que los ha obligado a dedicar los ahorros de su vida y a pedir dinero prestado para afrontar la deuda. También han tenido que sacar de allí a Juan José para llevarlo al Hospital Metropolitano de Monterrey, un centro público. Su esposa detalla que en ese recinto hospitalario se encuentra actualmente en cuidados intensivos, sedado, intubado y con respiración artificial.

«Residimos en La Orotava; siempre he sido vecina del Puerto de la Cruz y me considero muy de El Puerto», explica Carolina Martínez a este periódico. Su marido es conocido en la Ciudad Turística, entre otros motivos, por haber estado al frente del Casino. Martínez afirma sentirse «abandonada por las instituciones» españolas. «A pesar de la reputación solidaria de España con otros países, las personas nacidas y trabajadoras aquí, que pagamos impuestos fielmente cada año, no recibimos el apoyo necesario cuando lo necesitamos», lamenta. «Es como si estuviéramos en una cárcel sin barrotes. No veo la salida por ningún sitio», indica, si bien confía en que el apoyo de sus amigos y contactos de la Isla los pueda ayudar.

Los detalles de lo ocurrido los ha expuesto su hija residente en México a través de una iniciativa de crowdfunding en Gofundme para tratar de recaudar fondos. Esta lleva por título Ayuda a afrontar el tratamiento y medicamentos de mi padre. «Yo soy su hija María Victoria y resido actualmente en la ciudad de Monterrey (México), donde, tras un año de no haberlos visto, mis padres decidieron venir a visitarme y tenían su viaje programado del 14 de marzo al 25 de abril», comienza la joven. «El día 31 de marzo, ya estando en Monterrey, mi padre comenzó a sentirse mal, con mucho cansancio, tos y falta de aire al respirar. Pensado que esto podría ser una gripe o catarro, acudimos a una consulta médica en un hospital y se le recetaron varios medicamentos», prosigue. «Tras varios días, el día 10 de abril, mi padre empeoró y regresó a una consulta médica, esta vez en una clínica externa, donde perdió la sensibilidad total de su pierna derecha durante varios minutos», apunta.

Siguiendo su relato, de allí fueron a un hospital privado, le detectaron varios trombos «y se determinó que sus pulmones estaban colapsados». Uno de los pasos siguientes fue realizarle una trombectomia quirúrgica en la pierna para poder extraer los trombos. «Mi padre va a requerir una nueva operación en su pierna llamada angioplastia y colocación de stent, lo cual es muy costoso y sobrepasa los 15.000 euros, pero esto es necesario para poder salvar su pierna», sostiene. No obstante, precisa su hija que lo más preocupante es la afección pulmonar.

«Tras 20 días en el hospital privado tuvimos que pagar una cuenta que superaba los 90.000 euros (1.620.000 pesos mexicanos), teniendo que pedir dinero prestado y endeudarnos ante la grave situación», expone sobre el aspecto económico. «Mis padres habían contratado un seguro de viaje; sin embargo, el seguro no se quiere hacer cargo de la póliza, alegando que la enfermedad de mi padre ya venía desde España (nadie sale de viaje estando enfermo)», asevera, antes de agregar que, «debido a que ya no tenemos más recursos económicos, tuvimos que trasladar a mi padre a un hospital público, donde la atención no es la misma y todo es mucho más lento».

Su hija admite que nunca pensaron que pudiese ocurrirles lo que les está sucediendo en las últimas fechas. «Pedimos solidaridad y que empaticen con nosotros», continúa, antes de pedir ayuda para compartir lo que están viviendo y para sumarse a la campaña de crowdfunding que han puesto en marcha. «Cualquier donación, por muy pequeña que sea, nos puede ayudar para que mi padre se pueda recuperar y pueda regresar a casa», concluye.