Un estudio planifica el riego del aguacate y la platanera en Tenerife

El Cabildo de Tenerife, a través del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), estudia fincas de plátanos y aguacates para optimizar los riegos de estos cultivos en toda la Isla. El proyecto Regadia, desarrollado junto al Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA) y la Universidad de La Laguna (ULL), permitirá prever las necesidades del aporte de agua para estos cultivos a siete días vista; es decir, con aproximadamente una semana de antelación. Esto permitirá planificar.

Regadia también incluye el análisis de las comarcas más importantes de la Isla en las que cultivo plátano y aguacate con el objetivo de tomar decisiones sobre el riego de las fincas en estudio y prever las necesidades de aporte de agua de esos cultivos en el horizonte temporal mencionado. Una vez se disponga de un conjunto de datos lo suficientemente representativo se comenzará a trabajar en modelos predictivos de riego usando para ello técnicas de inteligencia artificial (IA).

La platanera constituye el cultivo de mayor demanda hídrica en Tenerife y representa el 60% del consumo de agua agrícola insular. Por otra parte, el cultivo de aguacate, que requiere de un aporte de agua elevado, está creciendo exponencialmente los últimos años.

Visitas técnicas

Los técnicos de ITER, gracias al soporte de la Oficina del Regante del Cabildo de Tenerife, han realizado visitas a varias de las fincas de platanera y aguacate para evaluar las características de las parcelas en las que se instalarán contadores de agua y sensores de humedad. El ITER trabaja también en el desarrollo de los dispositivos electrónicos que se instalarán en el campo para, por un lado, recoger los datos de los sensores y, por otro, enviarlos a un servicio de almacenamiento en la nube que quedará instalado y disponible en el supercomputador del Instituto (HPC) para su posterior explotación en el marco del proyecto.

En paralelo, el ICIA ha comenzado a realizar los análisis de muestras de suelo de fincas representativas, con el objetivo de caracterizar la capacidad de retención de agua y de esta manera aportar una información de gran valor a los modelos predictivos.

El proyecto Regadia, coordinado por la Unidad de Robótica del ITER, tendrá una duración de 36 meses y está financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación y la Agencia Estatal de Investigación y por la Unión Europea en el marco del Plan de Recuperación Next Generation y del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España (PRTR).

El proceso de trabajo consiste, entre otras tareas, en parcelar las fincas que forman parte del estudio; colocar sensores de tensión para obtener datos y recoger muestras del terreno en el análisis para la caracterización del suelo.

El consejero de Agricultura, Ganadería y Pesca del Cabildo de Tenerife, Javier Parrilla, valora en declaraciones a EL DÍA: «El cultivo del aguacate ha experimentado un incremento de superficie sustancial en nuestra, y aún siendo muy respetuoso, pues mayoritariamente recupera espacio en abandono, requiere conseguir la mayor eficiencia en el regadío».

Para conseguirla, apunta Parrilla, la Oficina Insular del Regante «lleva desde 2020 trabajando en la reducción del consumo de agua en la plataneras, con descensos de hasta un 15%». Añade que «nuestro objetivo principal ha sido tratar al sector en su aspecto más profesional». Incide en la importancia de «ayudar al agricultor a reducir costes de producción, además de acompañarlo».

Parrilla pone énfasis en la iniciativa de «poner a disposición del productor isleño un mayor caudal, de más calidad y a mejor precio como es el que aporta el agua regenerada».

Comenta al respecto que «los programas experimentales que sirvan para optimizar y racionalizar el agua dedicada a la agricultura siempre serán una propuesta interesante en territorios como el insular en el que la presión hídrica es algo constante».

Defensa del agua regenerada

El consejero del sector primario concluye: «Todos los observatorios y las herramientas que se puedan usar para esta función servirán y repercutirán en un uso más sostenible de los recursos, los cuales hay que cuidar y mimar hasta el extremo, como ya se hace desde la generación de agua tratada a partir de las depuradoras».

Según el último Mapa de Cultivos del Gobierno de Canarias, Tenerife cuenta con algo más de 43.000 hectáreas de superficie agrícola, el 21% del territorio insular. El 43%, unas 18.800 hectáreas, está cultivado, mientras el resto se encuentra actualmente en abandono o en barbecho. La huerta sigue siendo la superficie cultivada predominante en la Isla (43% del total), seguida por la platanera (20%), la viña (15,6%) y los frutales (12,7%). El aumento de la huerta se centra los últimos años, precisamente, en el sistema del barbecho, la tierra de labranza que se deja descansar; es decir, no se siembra durante uno o más años.

La producción comercializada de plátano se situó en 2021 en Canarias por encima de los 409 millones de kilos. Con este volumen comercializado, la facturación del sector productor alcanzó los 396 millones de euros el año pasado. Un volumen de negocio que posibilitó el mantenimiento de la actividad para los 12.000 empleos que gestiona el sector en las islas. Tenerife representó el 45% de la producción total.

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