El Cabildo quiere excluir la zona agrícola de la ampliación de Rasca

El Cabildo de Tenerife solicita la protección de la zona agrícola de la reserva natural especial del Malpaís de la Rasca. Su consejero Antolín Bueno explica que la Corporación apoya la ampliación de la reserva natural especial «excluyendo los terrenos actualmente dedicados a la actividad agrícola, en la línea de lo decidido en la Mesa Insular del Vino de Tenerife» y de la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Canarias (Asaga Canarias Asaja).

Antolín Bueno defiende que «es necesario proteger y salvar el suelo agrícola. El Parlamento de Canarias pretende extender la protección de las 312 hectáreas de superficie actual hasta las 557 hectáreas, ignorando la actividad agrícola que se desarrolla en la parte noroeste, de ahí que hayamos presentado esta moción».

En el acuerdo, el Cabildo insta al Parlamento de Canarias a revisar la urgencia de la Proposición de Ley 10L/PPL-0013 sobre la ampliación de los límites de la reserva natural especial del Malpaís de la Rasca, excluyendo de esta los terrenos actualmente dedicados a la actividad agrícola, mientras este uso se mantenga.

A través de la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias, el Malpaís de la Rasca fue catalogado como Paraje Natural de Interés Nacional, en el ámbito de la Comunidad Autónoma, y reclasificado a Reserva Natural Especial por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias.

El cultivo predominante en el Malpaís de la Rasca es el viñedo, con una ocupación de 25 hectáreas en las que se cultivan variedades tan emblemáticas como la malvasía aromática, marmajuelo y moscatel de Alejandría.

También incluyen instalaciones, como una bodega visitable o viviendas de agricultores, almacenes para material y maquinaria agrícola, cuartos de riego, hidrantes y depósitos de agua, además de otros cultivos: 15 hectáreas de platanera bajo invernadero, cerca de tres hectáreas de aguacate y 18 hectáreas de hortalizas en ejecución para adaptar los suelos a futuras plantaciones de viñedos. La producción de uva obtenida de estas 25 hectáreas representa en la actualidad el 10% de la Denominación de Origen de Abona.

Al respecto, Antolín Bueno señala que «el proyecto agrícola desarrollado está perfectamente estructurado para lograr una actividad enoturística relevante, con la visión de integrar los valores ambientales de la reserva colindante con los agronómicos, logrando revalorizar la agricultura gracias a la vocación turística de los municipios de Arona y Adeje».

La presidenta de Asaga Canarias Asaja, Ángela Delgado, expresó en su momento la confianza del sector en que el Gobierno de Canarias excluya la actividad agrícola de las limitaciones que se impondrán al uso del suelo una vez se amplíe la reserva y de la consecuente pérdida económica y de empleo. «No estamos en contra de la ampliación, pero sí de que la nueva normativa impida el normal desarrollo de la viticultura de esta zona».