Ingresa en prisión el acusado de apuñalar a un taxista en Tenerife

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Granadilla de Abona decretó a mediodía de este viernes el ingreso en prisión provisional para el joven acusado de atracar y apuñalar a un taxista, así como de tratar de robar a otro ciudadano, en la localidad de San Isidro en la madrugada del pasado jueves.

La autoridad judicial considera que el arrestado, de nacionalidad española y vecino de San Isidro, es el presunto autor de un delito de lesiones y otro de robo con violencia.

Apuñala a un taxista en Tenerife para robarle la recaudación

Agentes del Área de Investigación de la Guardia Civil de Granadilla pusieron a disposición judicial al acusado, que fue detenido horas después del citado suceso.

Los hechos ocurrieron a las 00:30 horas del jueves en la calle José González Rivas, que es el acceso entre el centro de San Isidro y la urbanización Los Cardones y la carretera de Atogo. Según explicaron algunas fuentes, a la altura de la tienda del Horno de Pan, dos individuos esperaban a un taxista que había terminado su turno. Según una de las fuentes, uno de los individuos le exigió dinero al conductor del vehículo de servicio público. Y este le dio lo que tenía. Sin embargo, el atracador le exigió más y entre las partes se produjo un forcejeo.

En un determinado momento, el delincuente apuñaló al taxista. La escena fue vista por un compañero del afectado, que lo recogió y lo trasladó a Urgencias del centro de salud de San Isidro. Debido a la magnitud de las lesiones, el personal sanitario consideró oportuno trasladar al herido al Hospital Nuestra Señora de La Candelaria, donde fue sometido a una operación. En la tarde del jueves se hallaba estable y no se temía por su vida.

Pero este no fue el único robo con violencia protagonizado por el mismo individuo. Apenas diez minutos antes, según una de las fuentes, trató de quitar con violencia una bandolera y un patinete eléctrico a un joven. Entre las partes se produjo un forcejeo. Y varios vecinos y testigos empezaron a increpar al ladrón y a amenazarlo con que iban a llamar a la Policía. Al final, el ladrón se marchó del lugar.