Coronavirus

La Fiscalía pide cárcel para unos padres de Mallorca que dejaron de llevar a sus hijos al colegio por miedo al covid

El ministerio público reclama cuatro meses de prisión para los dos acusados por no escolarizar a los tres menores durante el curso 2020-2021

Un juzgado de Palma investiga al acusado por un posible delito de agresión sexual.

Un juzgado de Palma investiga al acusado por un posible delito de agresión sexual. / B. RAMON

Marcos Ollés

La Fiscalía pide penas de prisión para los padres de tres niños residentes en Llucmajor (Mallorca) que dejaron de llevarlos al colegio por miedo a que se contagiaran de coronavirus. El ministerio público sostiene que incumplieron su obligación de escolarizar a los menores, de entre seis y diez años, en el curso 2020-2021, y les imputa un delito de abandono de familia. Reclama por ellos sendas condenas de cuatro meses y medio de prisión. Los dos procesados tienen antecedentes penales.

Ayer se celebró una vista previa en un juzgado de lo penal de Palma, donde las partes no alcanzaron un acuerdo de conformidad. La magistrada señaló la vista oral para el próximo mes de mayo.

Los hechos, según detalla la Fiscalía en su escrito de acusación, ocurrieron tras el confinamiento general impuesto a raíz de la pandemia del coronavirus. Los tres menores -dos niñas y un niño- estaban matriculados en un centro educativo de Llucmajor, al que no acudieron cuando se reanudaron las clases en septiembre de 2020.

Fue la Policía Local de Llucmajor quien detectó su situación varios meses después, en febrero de 2021. A los agentes les llamó la atención ver en días diferentes cómo los menores jugaban a la puerta de su domicilio en horario escolar y realizaron diversas indagaciones antes de comunicar lo ocurrido a la Guardia Civil. El instituto armado abrió una investigación y confirmó que los tres niños llevaban todo el curso sin ir a clase.

Patria potestad

El caso acabó en un juzgado de instrucción de Palma, que abrió diligencias. Los progenitores alegaron ante el juez que dejaron de llevar a los niños al colegio por miedo a que se contagiaran de coronavirus. Afirmaron que su hija pequeña había estado ingresada anteriormente por problemas respiratorios y aportaron documentación médica.

La Fiscalía reclama ahora para ellos sendas condenas de cuatro meses y quince días de prisión y su inhabilitación para ejercer la patria potestad de los tres menores durante siete años.

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