El turismo de lujo recoge avales como motor para la recuperación económica de La Palma

La Isla apuesta por desarrollar proyectos que estén vinculados a instalaciones hoteleras de cinco estrellas, de manera que atraigan a turistas de mayor poder adquisitivo

Plano de la maqueta de la futura instalación hotelera de lujo.

Plano de la maqueta de la futura instalación hotelera de lujo. / E. D.

La apuesta por establecimientos hoteleros de alta calidad y que atraigan a turistas de gran poder adquisitivo cambia el paradigma turístico de la Isla, vinculado a pequeños complejos y villas independientes, apostando por dos grandes infraestructuras asociadas a servicios deportivos o de salud. Si primero se conoció y ya está en curso administrativo el Ecorresort de La Pavona, con 1.600 plazas y un campo de golf, ahora le llega el turno al proyecto Dichosa Wellness Clinic. El objetivo es lograr la definición de interés insular y permitir la construcción de una instalación hotelera vinculada con la salud, que dispondrá de 564 camas al sur de las coladas del volcán Tajogaite.

El consejero encargado de impulsar los expedientes administrativos de ambos proyectos es Gonzalo Pascual, responsable de la Planificación insular, quien destaca que «La Palma necesita urgentemente una diversificación económica que ha de llegar aparejada a la industria y al turismo».

Eso es lo que se persigue con proyectos como Dichosa Wellness Clinic o el Ecorresort de La Pavona, que según Pascual permitan contraponer iniciativas a los indicadores socioeconómicos que revelan que la Isla «necesita un cambio, que ha de llegar a través de inversiones de calidad y que respeten nuestros valores paisajísticos y medioambientales».

A ese respecto, recalca que esos valores serán analizados en dos documentos indicados para ello, como son las evaluaciones ambientales, e insiste en que «sin inversión y diversificación económica no se generará empleo» ni la administración tendrá recursos suficientes para acometer los planes de gestión previstos para revalorizar y atender los espacios naturales.

El proceso de audiencia pública del proyecto se complementará con informes del Cabildo: Turismo, Medio Ambiente, Consejo Insular de Aguas o Patrimonio, quienes se encargarán de calificar la idoneidad o no de la declaración de interés insular. Una vez recibidos, además de las sugerencias del proceso de participación, las conclusiones se elevarán, primero, al Consejo de Gobierno Insular y, posteriormente, a una comisión informativa, y será después cuando la propuesta llegue al pleno de la Corporación.

Lo cierto es que el actual marco temporal, con un proceso electoral y unas elecciones por medio, hacen prever que estos pasos administrativos se retrasarán hasta después de las elecciones del 28 de mayo, teniendo en cuenta que cualquier decisión no es vinculante y tendrá que ser la futura Corporación la que decida sobre el interés insular que permite continuar con el expediente.

Gonzalo Pascual apunta a que se trata de «un trámite preceptivo para después requerir al promotor la presentación de toda la documentación necesaria según la Ley de Islas Verdes».

El consejero también hace hincapié en que es importante para la Isla «recuperar plazas alojativas» tras la erupción del Tajogaite que ha dejado inutilizadas un total de 5.000 camas. Según Pascual se trata de «una apuesta por la calidad y no por la cantidad».

En esa misma línea se manifiesta el presidente de la Federación de Empresarios de La Palma (Fedepalma), David Fuentes, quien recalcó la importancia de los proyectos estructurantes para la economía y el sector turístico, incidiendo en que tanto el Ecorresort como el nuevo hotel vinculado a la salud vienen avalados por la iniciativa e inversión privada, ofreciendo servicios de calidad.

Suscríbete para seguir leyendo