AUTONÓMICAS | INDICADORES DE LA LEGISLATURA

Muchos desafíos para cuatro años

Acaba una legislatura convulsa donde se ha hecho frente a retos atípicos, pero sin lograr que Canarias se sitúe en mejores condiciones económicas y sociales

Muchos desafíos para cuatro años

Muchos desafíos para cuatro años / E. D.

Quien le iba a decir al pacto de las flores cuando se inició la legislatura en julio de 2019 lo que se avecinaba. Ahora, casi cuatro años después el presidente Ángel Víctor Torres y sus socios sacan pecho por la gestión de los distintos desafíos que han ido surgiendo uno tras otro, especialmente la pandemia del Covid y la erupción del volcán de Cumbre Vieja. Canarias llega a las elecciones municipales y autonómicas del 28-M con una buena parte de los principales indicadores económicos favorables, algunos de ellos impulsados por el efecto rebote después de la catarsis que supuso el Covid, de tal forma que ahora se ha llegado a un ligero enfriamiento de la actividad tras unos meses de cierta euforia por la bajada del paro, la subida de la afiliación a la Seguridad Social y los buenos datos del sector turístico.

El ‘pacto de las flores’ rompió con 26 años de dominio nacionalista en el Gobierno regional

Ha sido una legislatura singular y atípica. Un pacto a cuatro rompió el dominio de 26 años consecutivos de Coalición Canaria al frente del Gobierno regional. Ángel Víctor Torres se convertía en el segundo socialista en presidir la Comunidad Autónoma, solo antecedido por Jerónimo Saavedra, y la tercera mayoría de escaños en el Parlamento más alta tras la de Saavedra en 1983 –27 escaños– y de Juan Fernando López Aguilar en 2007 –26 escaños– con 25 asientos en la Cámara. La torpeza de unos y la habilidad de otros lograron que el árbitro político de Canarias, Casimiro Curbelo, se inclinara esta vez por un pacto de izquierda después de haber apoyado en la legislatura anterior un pacto de centro derecha. Era un escenario nuevo y como tal la expectación era máxima dada la inestabilidad política que ha caracterizado la historia autonómica de las Islas.

Poco duró la alegría del estreno de Torres al frente del Ejecutivo cuando recién llegado a la Presidencia fue el grave incendio forestal que asoló parte de la cumbre de Gran Canaria y poco tiempo después la quiebra de uno de los turoperadores más importantes del momento, Thomas Cook. Sin embargo, lo peor estaba por llegar en forma de virus.

Crecimientos

En 2019 el crecimiento de la actividad económica de las Islas –Producto Interior Bruto– fue del 1,8% y la tasa de paro había bajado del 20%, un logro para una comunidad que en la crisis financiera que se inició en 2008 había superado el 30% de su población activa en el desempleo. El paro registrado superaba las 200.000 personas y los afiliados a la Seguridad Social sumaban 824.869 trabajadores. El IPC seguía su tónica habitual en esos años y apenas se incrementaba un 0,4%.

El sector que mantiene más de un tercio de la economía canaria, el turismo, acabó el año con 15,1 millones de visitantes, más de 13 millones de ellos extranjeros. El gasto turístico fue de 14.900 millones de euros y tanto el PIB turístico como el empleo del sector superaba con creces el tercio de la actividad económica del Archipiélago.

El hundimiento del PIB canario como consecuencia de los efectos del Covid y el cero turístico desde marzo de 2020 fue catastrófico. La recuperación ha sido en forma de V y así como el conjunto de la riqueza económica de las Islas cayó más de un 20%, después se incrementó y terminó 2022 con un saldo positivo del 8,2% y un volumen similar al de 2019 –de 47.483 millones a 47.762 millones–, es decir, lo comido por lo servido. De hecho, el PIB por habitante ha variado poco en cuatro años, de 21.251 euros a 21.816, como consecuencia de los datos negativos que ofrece la productividad en Canarias, uno de los mayores lastres que arrastra la actividad en el Archipiélago en comparación con la media autonómica. Asimismo, indicadores como la matriculación de vehículos han remontado después de la larga sequía de años anteriores, pero en números absolutos el conjunto de matriculaciones se mantiene por debajo de las de 2019. La venta de coches de alquiler ha logrado mantener las cifras del sector ante la caída del consumo privado.

Los datos positivos de empleo y afiliación contrastan con la caída de la productividad

El golpe que ha supuesto la pandemia cayó como un jarro de agua fría en los indicadores sociales. Además del paro, los índices de pobreza, el abandono escolar, la dependencia o las listas de espera mantienen a Canarias en el ranking de regiones con más debilidades sociales y las mejoras en los mismos han sido escasas. Al descenso de la productividad y los bajos salarios se unen la tasa de pobreza, que sigue siendo alta aunque ligeramente inferior a la de hace cuatro años, o unas cifras de abandono escolar que también ha descendido pero siguen estando por encima del 10%. Partir el vagón de cola ha provocado que, aunque hayan mejorado las cifras de la dependencia, continúen en una situación que dista aún de las comunidades más avanzadas en la aplicación de este derecho. El cuatripartito presume de haber avanzado en los dos últimos años más que en todos los anteriores desde que entró en vigor la Ley de Dependencia pese a las dificultades en materia de personal y de tramitación de los miles de expedientes que se agolpan en la Administración.

La dependencia se ha convertido en uno de los principales retos de Canarias ante una población cada vez más envejecida y que reflejan los números. Las Islas contaban en 2019 con 2.206.901 habitantes y ahora cuenta con 2.261.654, es decir, un crecimiento moderado después de las fuertes subidas experimentadas en el apogeo de finales de los 90 y los primeros 2000. Sin embargo, crece más la población compuesta por mayores de 65 años. En 2020 se contabilizaban 370.060 mayores y para 2023 se estiman en 404.990. En unos años esta franja de edad poblacional superará los 600.000 frente a la contracción que sufren los nacimientos, que están por debajo de la media.

Una población cada vez más envejecida colapsa el sistema sociosanitario del Archipiélago

El progresivo envejecimiento de la población pone sobre la mesa la necesidad de profundizar en la mejora de la dependencia pero también, y vinculado estrechamente con este derecho, la ampliación de las camas sociosanitarias para evitar el colapso que viven la sanidad pública asistencial y hospitalaria. Una de las grandes asignaturas pendientes de la legislatura ha sido la lentitud del plan de infraestructuras sociosanitarias, lo que está generando importantes problemas en los grandes hospitales de Canarias.

Listas de espera

Una de las principales consecuencias que ha traído el final de la pandemia ha sido el incremento de las listas de espera sanitarias en Canarias, que se han disparado como en los peores tiempos. Las últimas cifras reflejan que la media de días de espera para una operación quirúrgica en las Islas es de 157 días, frente a los 121 de la media nacional. En el caso de las consultas de especialistas en el Archipiélago hay que esperar una media de 121 días frente a los 95 días de media general. El Gobierno se defiende en que primero había que atender a la emergencia del Covid y la población se retrajo , además de que la mayoría de las comunidades autónomas también se han visto afectadas por esta situación, pero el hecho es que Canarias parte de un escenario que ya era malo antes de la pandemia y ahora empeora a pesar del fuerte incremento que ha experimentado la inversión sanitaria ya que, debido precisamente a los fondos que se han destinado a la lucha contra el Covid, las Islas están muy cerca de la media de inversión en sanidad por habitante con 1.714 euros frente a los 1.800 de media autonómica.

El gasto sanitario sube hasta la media por el Covid, pero se disparan las listas de espera

Además del virus, la isla de La Palma tuvo que afrontar su propio vía crucis con la erupción del volcán de Cumbre Vieja entre septiembre y diciembre de 2021. La imágenes de la lava descendiendo hacia el mar han dado la vuelta al mundo, pero también la de las casas que quedaron enterradas por las coladas. Hay descontento entre los afectados pese a los esfuerzos del Gobierno central y del canario por agilizar la tramitación de las ayudas y disponer de fondos específicos. Una de las principales incógnitas del 28-M es cuál será el comportamiento de los palmeros sobre los partidos que se presentan y su nivel de abstencionismo.

El colofón de la legislatura ha sido la guerra de Ucrania y su impacto sobre la economía, por un lado, y la inflación que comenzó su ascenso antes del conflicto bélico, por otro, lo que no hace sino incrementar los problemas económicos de las familias más vulnerables. Con estas hechuras PSOE, NC y Podemos comparecen ante las urnas con unos sondeos que les favorecen a priori y con la defensa del mismo pacto si los números dan. A dos semanas de la cita con las urnas hay varios escenarios abiertos, tanto en el flanco de las fuerzas de izquierda como en el de la oposición de centro derecha.

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