CD Tenerife

Ángel ya está en su mejor curso goleador con el CD Tenerife

El lagunero llega a la decena y admite que su tanto al Eibar es el que le ha hecho «más feliz»

Ángel, felicitado por Amo.

Ángel, felicitado por Amo. / María Pisaca

Manoj Daswani

Manoj Daswani

Para quien ha hecho goles toda su vida, hacerlos a los 36 años y en el club de su vida ha de ser gloria bendita. Solo así se entiende que la celebración pletórica de Ángel Rodríguez Díaz (La Laguna, 1987) y el sabor a miel de sus goles blanquiazules sea especial cada vez que sus balones besan la red. Ocurrió hoy casi sobre la bocina, al epílogo de un partido que se dirigía al empate y que decidió él, asistido por un Teto que hizo lucir la conexión tinerfeña del representativo. Autopista blanquiazul a tres puntos que saben a alivio.

Aunque tal vez no lo supiera en el momento de marcar y luego celebrar, el tanto de Ángel le sitúa ante su mejor año blanquiazul en goles. Con el Tenerife había hecho dos tantos en la campaña de su debut (ambos al Murcia), siete de ellos en el curso de su consolidación (incluido su memorable triplete en Lorca) y luego seis a su regreso de una doble cesión a Osasuna y Castilla. Fue en la histórica campaña del último ascenso a Primera División, del que participó como mejor se le da –con goles– mientras no le eclipsó Nino, que era entonces capitán general.

Rodríguez, que tuvo ocasión de descorchar sus goles también en Primera con el representativo (hizo uno al Real Valladolid en la máxima categoría en el José Zorrilla) no había vuelto a sentir lo que era anotar con el equipo de su isla hasta que regresó este año al Tenerife. Lo hizo como hijo pródigo, en un contexto de máxima felicidad y emoción por su fichaje, pero también con severas dificultades para encontrar su sitio. Primero una pretemporada difícil y una inoportuna lesión estival, luego la hiel de la suplencia, la desesperación por que los minutos no llegasen, dos rojas directas... y para todo el mal, siempre el mismo remedio:goles.

«Podría decir que el de hoy ha sido el que me ha hecho más feliz», describió el héroe y protagonista de la contienda tras su noveno acierto de este curso. Luego, incluso tuvo opción para el décimo. «Pero llego asfixiado a esa jugada, cansadísimo. Intento controlar y chutar. Quería tirarla abajo, pero se me fue», lamentó. «Me preguntaron bromeando los compañeros por qué no la piqué, pero así lo hice en las dos ocasiones anteriores y salió mal. Pudo ser el gol de la sentencia, pero estoy feliz porque hice uno... y ganamos. Cuando marco pero perdemos, no me voy bien», adujo.

En cuanto a sus dígitos y su suplencia, explicó sus sensaciones. «Esta situación ya la he vivido otras veces y en otros equipos. Salía mucho de suplente en el Getafe, ya que tenía a dos grandes delanteros delante y me tocaba hacer de revulsivo. Ahora también me ha tocado ese rol e intento ayudarm igualmente al equipo. Me guste o no, no depende de mí», respondió ante las preguntas de la prensa.

En cuanto al tramo de calendario que le espera al Tenerife, con visita al Albacete y luego duelo con el líder Leganés, pronosticó el pichichi blanquiazul que «de aquí al final, no habrá partido fácil», si bien la intención es acabar en la mejor posicion posible. Ya sin opciones reales de disputar la promoción, Ángel aspira a cerrar el curso de su regreso cerca de los mejores. Y con más victorias como ésta. «Tenemos una plantilla competitiva para competir contra cualquiera. Lo hemos hecho contra todo un Eibar y sabe bien ganar así;estas victorias sufridas valen el doble», acertó a decir, aún fatigado por el gran esfuerzo.