La primera insignia de oro y brillantes desde 2015

La distinción de Jorge Valdano con la Insignia de Oro y Brillantes del CD Tenerife es la primera que concede el representativo en los últimos ocho años y la primera bajo presidencia de Paulino Rivero, que fue quien le dio al hispano argentino la feliz noticia. El entrenador que cambió la historia del representativo aceptó encantado este merecido reconocimiento y se puso a disposición del club para buscar en su agenda la mejor fecha posible para ser condecorado: será el jueves 21 de septiembre, en el Teatro Guimerá de Santa Cruz, de modo que coincidirá con la conmemoración del trigésimo aniversario del primer concurso de la institución en las competiciones europeas.

El primer partido del club en la Copa de la UEFA tuvo lugar el 15 de septiembre de 1993, así que el viernes volverá a ser recordado por cumplirse justamente tres decenios desde aquel debut contra el Auxerre, que se convirtió en rival blanquiazul tras la exclusión del Olympique de Marsella por el caso Tapie, histórico dirigente del club galo acusado de corrupción, sobornos y otros delitos.

Se da la circunstancia de que Valdano sucederá en la selecta lista de condecorados con la dorada insignia al presidente que apostó por él, Javier Pérez, quien recibió la insignia a título póstumo en el homenaje que le tributó el CD Tenerife a finales de diciembre de 2015, momento en el cual también se bautizó con su nombre la Ciudad Deportiva de Geneto.

Antes que Pérez, el consejo de administración anterior determinó dar máximos honores a otros dos mandatarios blanquiazules como Julio Santaella, Colo; y Víctor Pérez de Ascanio. El acto de entrega de las distinciones tuvo lugar en el Real Casino de Tenerife. El acuerdo de la directiva blanquiazul data del 5 de abril de 2015 «en base al reglamento de honores y distinciones de la entidad y una vez tramitado el preceptivo expediente».

Lo propio había ocurrido unos meses antes, en noviembre de 2014, con el expresidente del Cabildo como destinatario de la misma distinción. En el caso de Ricardo Melchior, se tuvieron en cuenta los siguientes méritos: que durante sus años como presidente de la administración insular se completó la remodelación del Heliodoro y el palco de honor; la puesta en marcha del traslado de la sede social del club a las oficinas del estadio y todas las gestiones que realizó por el bien de la entidad.

Con esta insignia para Jorge Valdano, el nuevo consejo fija manual de estilo propio y pone el fútbol en el centro del foco. De paso, resuelve un agravio con el hispano argentino, a quien esta distinción debió serle entregada durante el año del Centenario, a cuyos actos centrales no fue invitado. Con unos meses de retraso, se cierra la herida y se le dan los honores que le corresponden.

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