Ángel Rodriguez: «Las dos veces en mi vida que lloré por fútbol fue por el Tenerife»

¿Qué supone para usted lucir otra vez este escudo en la camiseta?

Al final está claro que este escudo es especial para mí. No es lo mismo estar en otro club que defender al de tu tierra, estar donde te criaste, donde te formaste, de donde es tu familia. Aquí es donde me dieron la oportunidad de ser profesional y estoy muy contneto de poder volver a casa, en una gran institución y con la ilusión de hacer un gran año.

¿Y cómo es volver a casa?

Es un poco raro. Como llevamos 13 años viviendo fuera, mi mujer y yo nos habíamos acostumbrado a la rutina de estar solos con nuestros hijos; no tener a más gente alrededor, ni a los amigos de siempre ni a más familia. Ahora es todo diferente. Sales y te encuentras a un montón de gente, haces planes con tu entorno de toda la vida y estoy contento por ello. Es una gran ilusión haber dado el paso de estar de nuevo en el Tenerife y me siento muy feliz de estar con mis nuevos compañeros.

Ha dicho el presidente Paulino Rivero que hacía mucho tiempo que un fichaje del Tenerife no suscitaba tanta unanimidad. ¿Percibe usted el entusiasmo que ha despertado su contratación?

Yo estoy superagradecido de que la gente quisiera mi regreso y de que les haya gustado la noticia de mi fichaje. Estoy muy feliz de generar tanta alegría y contento conmigo mismo por haber dado el paso, que es importante para mí. Siempre he tenido en mi carrera muchos retos por delante, en distintos equipos, en distintas ciudades, pero siempre con la máxima ambición. Llegué a jugar en Primera, en las competiciones europeas, y pese a ser en Segunda, creo que este desafío es también muy bonito. Todos tenemos mucha ilusión de hacer un gran año, ¿por qué no estar con los mejores? Sabemos que hay clubes con mucho más presupuesto que nosotros, también sabemos que los que descienden parte con ventaja económica, pero tenemos un buen equipo y una plantilla que va a dar guerra.

¿Cómo recuerda el día que se confirmó su regreso al Tenerife?

Eso no lo voy a olvidar. Imposible. Cuando ya damos el paso y soy consciente de que vamos a ir a Tenerife, lo primero que quise fue comunicárselo a mi familia. Hicimos un vídeo con las niñas, les grabamos recibiendo ellas la noticia: «¿Dónde quieren que juegue papi el próximo año?». Y ellas no tenían duda. Querían volver, les grabamos diciéndolo y lo enviamos por todos nuestros grupos de wasap. Para mí no es un club cualquiera, es un club especial.

No sé si para entonces su familia y amigos ya lo sabían o lo suponían. Porque se llevaba todo el verano hablando de Ángel.

Sí, y lo intenté llevar de la mejor manera posible. Yo era consciente de que había ilusión y que hay mucha gente que confía en que pueda dar un gran rendimiento. Obviamente voy a estar a la altura. Voy a dar trabajo, ilusión y con eso seguro que la gente estará contenta conmigo y con el equipo.

Imagino que también es cuestión de no presionarse y de no ofuscarse si no llegan los goles.

Llevamos dos semanas muy intensas, prácticamente doblando sesiones todos los días, con entreamiento de hasta dos horas. Todos queremos resultados diferentes en estos partidos pero las piernas están fatigadas, acumulando fatiga para llegar en las mejores condiciones. Pero los resultados llegarán. El equipo que se está conformando es muy bueno, es importante que se haya mantenido la base y los que llegamos nuevos esperamos dar un salto de rendimiento para hacer un gran año.

De su conexión con Enric Gallego no hay dudas. Se conocen desde hace años.

Es de esos amigos que se queda para siempre. Estuvimos seis meses juntos en Getafe e hicimos muy buenas migas. Desde entonces mantenemos el contacto. Ya cuando firmó por el Tenerife le intenté ayudar de la mejor manera posible, asesorándole para vivir, para el tema de colegios y demás. Es un gran compañero, una gran persona y estoy feliz de coincidir otra vez.

Mirará usted atrás y tendrá posiblemente a Enric, o a Dauda. A Elady, a Roberto Löpez, a Corredera... Pensará: vaya equipo, ¿no?

El equipo que se está formando es muy bueno. Partiendo de la base de que ya lo que había era muy bueno. Además se ha mejorado en todos los puestos. Hay buen plantel pero la Segunda es larga, habrá rachas, momentos difíciles y tenemos que ser conscientes de que hará falta paciencia, sobre todo cuando haya situaciones complicadas.

Han revelado los dirigentes del Tenerife que rechazó usted ofertas muy superiores económicamente para asumir el reto de volver a casa, ¿pero el verdadero reto cuál es?

El reto es intentar un gran rendimiento al equipo después de un año en el que no fui muy protagonista en el Mallorca. No tuve muchos minutos y este año el reto es tenerlos en casa, ilusionar a la gente y estar arriba.

Y eso de la ilusión ya está ocurriendo. ¿Qué le sugiere que haya ya casi 11.000 abonados?

Veo mucha expectación, muchas ganas de que empiece la Liga. Nosotros también estamos muy ilusionados con la fecha de empezar. Yo es que ya llevo muchas pretemporadas a mis espaldas y te confieso que no son de mi agrado. Quiero que la competición empiece ya.

Las redes sociales recuerdan que hay muchas similitudes entre el último ascenso y esta temporada, por ejemplo la camiseta o el mal inicio en pretemporada...

De aquel año aún me acuerdo y mi madre tiene enmacada la foto de mi abrazo con Pablo Sicilia en Montilivi. Fue un día inolvidable. En mi vida solo he llorado dos veces por el fútbol porque creo que hay cosas mucho más importantes que el deporte. La primera fue en Girona y la segunda en Mestalla, que creo que recuerdas. Oltra tuvo que venir a levantarme y a secarme las lágrimas. Este club supone tanto para mí, es mi casa, de ahí que solo haya llorado en mi vida por un equipo. Y es este: el Tenerife.

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