Canarias busca un ‘plan B’ para la agenda isleña ante el riesgo de prórroga presupuestaria

Gobierno y CC reconocen que sin cuentas para 2024 se complicaría afianzar partidas, y afectaría a las relaciones con el Ejecutivo central

La consejera de Hacienda, Matilde Asián, en las Jornadas de auditoría y fiscalidad de Canarias junto a Santiago Durán y Emilio Álvarez

La consejera de Hacienda, Matilde Asián, en las Jornadas de auditoría y fiscalidad de Canarias junto a Santiago Durán y Emilio Álvarez / Juan Carlos Castro

Joaquín Anastasio

Joaquín Anastasio

Las luces rojas se le están encendido al Gobierno de Pedro Sánchez en uno de los objetivos que se marcó el presidente en su investidura, la aprobación cuanto antes de los primeros presupuestos del Estado de la legislatura, para los que todavía no tienen garantizados los apoyos necesarios. Paralelamente a esta situación se abre la incógnita sobre la posibilidad de poder materializar en términos presupuestarios la agenda canaria pactada entre el PSOE y CC, base del acuerdo para el apoyo de los nacionalistas canarios a la propia investidura y a la acción política del Ejecutivo central de los próximos años. Pasan las semanas y cada vez se asienta más la idea de que las nuevas cuentas públicas podrían quedarse en el tintero, mientras CC y el propio Gobierno de Canarias presidido por Fernando Clavijo interiorizan que quizá tendrán que buscar un ‘plan B’ para hacer efectivo su pacto con los socialistas, porque la agenda isleña puede que no tenga la pista de aterrizaje que necesita para su desarrollo y aplicación a efectos económicos.

Este horizonte de dudas surge por el hecho de que el Gobierno central sigue sin contar con las garantías de que uno de sus socios de investidura, Junts Per Catalunya (JxC), vaya a apoyar los nuevos presupuestos por las divergencias entre ambas partes en relación con la ley de amnistía, atascada en el Congreso por el rechazo del partido soberanista catalán a la misma en los términos inicialmente pactados, pero sobre la que ahora plantea una nuevas exigencias. Aunque la negociación entre el Ejecutivo y JxC sobre la medida de gracia para los implicados en el ‘procés’ y la de los presupuestos están en mesas separadas, es evidente que ambos temas están vinculados a efectos políticos. El Gobierno asume en este sentido que si la ley de amnistía encalla definitivamente, es muy probable que el partido de Carles Puigdemont presente una enmienda de devolución de las cuentas, o que dé cobertura a la que presentarán con toda seguridad el bloque de la oposición, con el PP a la cabeza.

Llegado este punto, la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que ya había tenido que retrasar sus previsiones iniciales, está empezando a barajar la posibilidad de renunciar a presentar nuevos presupuestos y mantener prorrogados definitivamente durante todo el año los de 2023. Es un horizonte que oficialmente aún no quieren contemplar porque esperan que finalmente haya un acuerdo con Junts, pero que están dejando caer quizá como medida de presión, si bien aseguran paralelamente que “con o sin amnistía “ y “con o sin presupuestos”, la legislatura seguirá adelante. El retraso que se está produciendo por este motivo, al que hay que añadir el hecho de que el Senado, donde el PP dispone de mayoría absoluta, acaba de rechazar la senda estabilidad que debería acompañar al proyecto presupuestario, va a provocar que las nuevas cuentas no vayan a estar listas en todo caso casi hasta mitad de año, lo que alimenta la idea de la prórroga de las ahora en vigor.

El Gobierno canario, en concreto el propio Clavijo como principal interlocutor de la ministra Montero, y CC no quieren especular aún sobre la posibilidad de que no haya presupuestos este año, pero empiezan a contemplar la idea de preparar otros escenarios. En concreto cómo hacer viables los compromisos de Sánchez que exigían partidas presupuestarias concretas para este año en materias como los convenios de infraestructuras, financiación, PIEC, inmigración, lucha contra la pobreza, o ayudas del REF. Pese a que desde hace meses el equipo de Clavijo y Montero intercambian papeles sobre la futura ficha canaria en las cuentas estatales, no habrá una negociación política como tal hasta que no se confirme que el Gobierno tenga listo un anteproyecto de ley que elevar al Consejo de Ministros, lo que es tanto como decir hasta que no tenga garantizado el apoyo de Junts y un principio de acuerdo con el resto de los socios parlamentarios.

Revisar relaciones

“La prorroga de los presupuestos de 2023 por el ruido en torno a la amnistía les costaría oportunidades a los canarios y canarias”, afirma el portavoz del Ejecutivo regional, Alfonso Cabello. “Lo que nos preocupa es todo aquello que habíamos conseguido avanzar sobre la agenda canaria y que requiere de una actualización de las partidas”, señala el portavoz del Ejecutivo. Cabello pone el énfasis en dos aspectos del pacto con el PSOE: la crisis hídrica y energética, “sobre la que estamos avanzando mucho para tener todos los proyectos necesarios y que una vez que tengan ficha financiera y poder realizar las licitaciones”, y el convenio de infraestructuras educativas.

¿Hay posibilidades de desarrollar la agenda canarias sin nuevos presupuestos. “Es mucho más complicado”, reconoce Cabello. “Tendríamos que entrar en negociaciones bilaterales con Hacienda e ir a partidas presupuestarias que ya están asignadas, y eso complica mucho el proceso”, añade. “Cuando empiezas un presupuesto nuevo hay una bolsa en la que se va priorizando el gasto, pero si vienes con uno prorrogado ya hay prioridades establecidas de antemano porque se ha distribuido ya antes. Las posibilidades de identificar partidas nuevas es más complicado”, afirma. “Estamos en contacto, con conversaciones frecuentes e intercambio de papeles con el Ministerio de Hacienda y el resto de ministerios, y a la espera de que nos convoquen para la negociación a nivel político entre CC y el Gobierno central”, el portavoz canario, aún con la esperanza de que haya nuevo proyecto presupuestario efectivo.

En todo caso, los nacionalistas creen que la prórroga de unas cuentas con dudas sobre su capacidad real de resolver la parte más crematística de la agenda isleña les obligaría a revisar las relaciones con el Gobierno de Sánchez, o al menos su estrategia en el Congreso. “El partido tendría que estudiar internamente la situación y ver cómo está respondiendo el Gobierno a cada una de los asuntos que habría que resolver sin nuevos presupuestos”, afirma por ejemplo el senador de CC, Pedro Sanginés. Cabello, por su lado, como miembro de la dirección nacionalista, asegura que “aunque sea avanzando punto por punto, creo que podríamos seguir jugando el partido”.