El colegio La Salle de Santa Cruz admite una "investigación en marcha" por las imágenes manipuladas de menores desnudas

El centro se ha visto salpicado por la investigación de dos alumnos menores del colegio por compartir fotos manipuladas de compañeras desnudas

Fachada del Colegio La Salle San Ildefonso de Santa Cruz de Tenerife.

Fachada del Colegio La Salle San Ildefonso de Santa Cruz de Tenerife. / El Día

Daniel Millet

Daniel Millet

El colegio La Salle San Ildefonso de Santa Cruz se ha convertido en protagonista tras la investigación abiertas a dos alumnos menores del centro por compartir fotos manipuladas de compañeras desnudas, también menores.

Estas imágenes, manipuladas con Inteligencia Artificial desde la aplicación Undress, han sido denunciadas por los progenitores de las alumnas afectadas. En estos momentos, la Policía Nacional, la Fiscalía de Menores y Educación se encuentran sumidos en una investigación por posibles daños al honor. Una investigación en la que, según el colegio La Salle de Santa Cruz, "estamos coordinados con ellos".

Desde este centro concertado, con mucha representación a nivel nacional, el director del colegio, Antolín Odon, asegura que "se ha aplicado el protocolo educativo de Canarias desde el primer momento". Esta manera de actuar se trata de informar inmediatamente a Inspección Educativa y a la Fiscalía de Menores de cualquier caso susceptible de considerarse un ataque a la intimidad y el honor entre los alumnos.

Odon asegura también que se encuentran "en coordinación con los padres afectados" y explica que no se pueden dar más detalles debido a que el principal objetivo del centro es "proteger a los alumnos y que no vuelvan a suceder hechos así".

Una denuncia tardía

La mujer no entendió que los responsables de La Salle le aseguraran que habían pedido al alumno que tenía las imágenes en su móvil que las borrara y al que se las pasó, que las dejara en su terminal. «Me comentaron que se habían asesorado con sus servicios jurídicos y que iban a trasladar los hechos a la Fiscalía de Menores», detalla.

Pero lo que vino después fue lo que le causó más extrañeza. «Acudí en los días posteriores a la fiscalía, para presentarme y que supieran que yo era madre de una de las niñas que aparecían en esas imágenes manipuladas con inteligencia artificial. No sabían de lo que les estaba hablando. No habían recibido ninguna comunicación del colegio».

La denuncia de La Salle entró en el sistema informático de la Fiscalía de Menores, según dice la madre que le trasladaron en esta unidad especial del ministerio público, el día después de que presentara su denuncia en la comisaría de la Policía Nacional de Santa Cruz. También acudió a Inspección Educativa, donde la atendió una funcionaria sin tener que pedir cita previa. «Primero me dijeron que tenía que esperar, que la inspectora estaba reunida, que debía pedir cita. Pero fue contar lo ocurrido y atenderme al momento».