Beñesmén y las hogueras: la llegada del verano celebrada por los guanches

La población aborigen de la Isla daba la bienvenida a una nueva estación con una fiesta de juegos, bailes y ritos... aunque en agosto

La celebración de las hogueras de San Juan es un rito pagano que procede incluso de los tiempos de los celtas. Numerosas civilizaciones a lo largo de la historia han adorado al sol como fuente de vida y por eso se entregaban a la fiesta y los rituales durante el día con la noche más corta.

Ahuyentar malos presagios o a llamar a las buenas cosechas eran los motivos para reunirse en torno al fuego y el origen de lo que hoy se celebra la noche del 23 de junio, con las hogueras de San Juan en la víspera de la onomástica.

También en Canarias, los aborígenes teníans su propia adoracióna al sol, deida al que los guanches de Tenerife denominaban Magec. Su fiesta más popular, de hecho, se realizaba en torno al cambio de estación, coincidiendo con la recogida de las cosechas. Su nombre es 'beñesmén' aunque los conocimientos de la astronomía de los pobladores isleños no era tan bueno pues situaban ese cambio estacional en agosto.

Recogida en la RAE

La propia Real Academía Española (RAE) recoge este término en su diccionario de léxico histórico, citando algunas de las menciones de la voz encontradas en documentación de la conquista.

"Según el cómputo de los aborígenes: Celebración del verano y la entrada en un nuevo año", reza la RAE para definir los términos beñesmén, begnesmet, benesmer, beñesmar y beñesmer de los que destaca su origen guanche y que traduce como "año nuevo".

Uno de los textos a los que alude la Academia es el de uno de los investigadores más importantes en el campo de la arqueología canaria, Luis Diego Cuscoy: "Y aun por la época del Beñesmén, correspondiente al estío, en que hacían las recolecciones, reuníanse de nuevo en banquete y alegres juegos".