Abogados que cotizan a la Mutualidad critican sus pensiones de jubilación

Abogados de varias provincias españolas se han sumado a una movilización de crítica a la Mutualidad de la Abogacía por las reducidas pensiones que percibirán una vez que se jubilen, entre los 67 y los 69 años. En algunos casos, estos ingresos oscilarán entre los 300 y los 400 euros, según explican algunos letrados en Tenerife. En los últimos años o meses, algunos de estos profesionales han consultado cuánto percibirán una vez que dejen de ejercer y se han llevado una desagradable sorpresa. Y es que, según indican desde el Colegio de Abogados de Santa Cruz de Tenerife, esas futuras pensiones se perciben en función de lo que cada uno haya cotizado.

Una de las principales reivindicaciones de parte de aquellos que han cotizado a la Mutualidad de la Abogacía es que se les permita realizar una pasarela al Régimen Especial del Trabajador Autónomo (RETA), que consiste en intentar poder recuperar sus aportaciones a dicha mutua y canjear ese capital por años de cotización a la Seguridad Social.

Otra demanda consiste en una mejora fiscal, pues no están de acuerdo con que la recuperación de los importes abonados a la Mutualidad tributen, cuando ese dinero cumple la función de una pensión de jubilación. Y, en tercer lugar, plantean mejorar la compatibilidad del cobro de la pensión con la continuación del ejercicio profesional, ya que muchos se verán obligados a continuar su trabajo ante lo limitado de las cuantías que van a percibir.

Una letrada tinerfeña recuerda que, hasta 1996, todos los abogados que querían ejercer por cuenta propia estaban obligados a inscribirse y cotizar a través de la Mutualidad de la Abogacía. Y, desde hace 27 años, se permitió a los que quisieran integrarse en el Régimen Especial del Trabajador Autónomo. Pero se planteó que quienes quisieran hacerlo perderían lo cotizado hasta entonces en la Mutualidad. Entonces, la profesional que ofrece su testimonio ya había trabajado diez años. Además, convencieron a muchos de los indecisos de que a la Mutualidad «pagabas menos y tenías más rentabilidad». «Pero era mentira», señala.

La clave del citado sistema es que el pago a la Mutualidad de la Abogacía se convirtió en una «capitalización individual»; es decir, lo que se paga cada mes de tributación es directamente proporcional a lo que se va a percibir durante la jubilación. En opinión de dicha profesional, con el paso de los años, «cada vez pagamos más y recibimos menos».

El decano del Colegio de Abogados de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Niederleytner, recuerda que en la provincia occidental ejercen unos 2.600 letrados. Y en la Mutualidad de la Abogacía figuran 2.901 personas en las islas de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro. Aclara Niederleytner que en esta última cifra también figuran registradores de la propiedad, notarios, funcionarios e, incluso, algunos jueces, por ejemplo. Para el decano, en este asunto no cabe la polémica, pues «cada uno tiene lo que cada uno ha puesto». Según Niederleytner, no resulta lógico que quienes han contribuido a la mutua con un Plan Básico (300 o 400 euros, por ejemplo), «ahora pretendan cobrar una pensión de jubilación de 1.500 euros».

El representante del Colegio de Abogados de Santa Cruz de Tenerife indica que quienes han sido previsores han aportado unas cantidades acordes a sus ingresos como profesionales. Como ejemplo, comenta Niederleytner los que ganan mensualmente 3.000 o 4.000 euros deben cotizar a la Seguridad Social unos 1.500. Para el decano, «la Mutualidad es válida y muy rentable, pero dependiendo de las cantidades que cada uno aporte».

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