PRIMERA INVESTIDURA TRAS EL 28M

Ayuso busca dar impulso político a la modernización de Madrid con la creación de una consejería de Digitalización

La presidenta solicitará a los ayuntamientos que colaboren en un plan de ayudas económicas a los comercios con 50 años de antigüedad y la reducción en el impuesto de plusvalías

Isabel Díaz Ayuso el día de la Constitución de la Asamblea de Madrid.

Isabel Díaz Ayuso el día de la Constitución de la Asamblea de Madrid. / EFE

Elena Marín

Isabel Díaz Ayuso será la primera presidenta autonómica en ser investida como tal tras las elecciones del 28 de mayo. Ocurrirá este jueves cuando vote la Asamblea de Madrid, donde su mayoría absoluta es incontestable y los noes de la oposición no servirán para frenar su nuevo mandato. En esta comunidad, a diferencia de lo que ocurre ahora mismo en Extremadura, Valencia, Baleares o Aragón, todo se resolverá rápido porque Vox no es determinante, como sí lo fue en las dos cortas legislaturas que le preceden.

Pero antes, este miércoles, Díaz Ayuso expondrá a los diputados de la cámara sus intenciones para esta próxima legislatura, su proyecto político. Y en su carta de presentación para los próximos cuatro años, la dirigente madrileña va a poner el foco, entre otros asuntos, en la creación de una Consejería de Digitalización en una estructura de Gobierno que mantendrá sus nueve departamentos y donde habrá una renovación total de responsables. Hasta ahora las todo lo referido a este sector se integraba en otro departamento, en Administración Local y Digitalización, con lo cual ni los proyectos ni las ideas serán nuevas, pero lo que se busca es dar un impulso político a este ámbito concreto.

Madrid, nodo digital europeo

Hace justo seis meses, la presidenta anunció la nueva Oficina de Impulso a los Centros de Procesamiento de Datos de la Administración autonómica con el que el Gobierno regional pretende captar 6.000 millones de euros hasta 2025. "Dentro de poco, Madrid podrá enviar a Nueva York a través de cable óptico 50.000 películas en un segundo", fue el ejemplo que utilizó entonces para que se entendiera por qué era necesario crear este espacio de asesoramiento a las empresas del sector y lograr su objetivo: convertir Madrid, en un plazo de cinco años, en un nodo digital, en la zona de Europa "con mayor tráfico de datos".

Tres meses después su Gobierno anunció otro proyecto en la misma línea: crear el primer cluster de computación cuántica de España en Madrid (en Boadilla del Monte), justo unos días antes de que se anunciara que el primer ordenador cuántico de España, impulsado por IBM y el Gobierno vasco, tendrá sede en San Sebastián. En realidad ni uno ni otro existen aún, son proyectos que pretenden ver la luz a partir de 2024 en ambos lugares y sirven, dicho de forma sencilla, para que, mediante algoritmos, las corporaciones encuentren formas para optimizar sus procesos productivos, por ejemplo, para el ahorro de combustible en el sector del transporte de mercancías, incrementar la capacidad de predecir enfermedades en determinados estadios u otras aplicaciones en el sector medioambiental. En todo caso, lograr esto sin un computador cuántico, que Madrid no tiene, es bastante complicado, según los expertos consultados.

Iniciativas como esta se suman a otros cuatro clústeres digitales que tiene proyectados la Comunidad (Transformación digital, en Torrejón de Ardoz; Internet de las Cosas, en Las Rozas; Inteligencia Artificial, en Leganés, y el de Blockchain de Tres Cantos) y es para dar visilibidad, impulsar y atraer fondos (privados y europeos) para ellos para lo que Ayuso ha decidido crear esta nueva Consejería. Será el primer ejecutivo regional con un departamento específico para este área con el fin de "consolidar la región como nodo digital del sur de Europa e impulsar proyectos relacionados con las nuevas tecnologías, que generen empleo y se conviertan en un polo de atracción para las grandes multinacionales y empresas del sector", según la información facilitada por el Gobierno aún en funciones.

Plan "Comercios con solera"

Junto a esta iniciativa, la presidenta también anunciará este miércoles un plan de ayudas para "establecimientos comerciales y de hostelería con más de 50 años de antigüedad", si bien gran parte del resultado dependerá de cómo respondan los ayuntamientos a la petición de la presidenta. El Gobierno regional establecerá una bonificación fiscal del 95% en el tramo autonómico del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, que solo beneficiará a aquellos que quieran vender su local, y pedirá a los municipios la misma rebaja impositiva en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), que solo podrá aplicarse en aquellos comercios que previamente hayan sido declarados de interés cultural, una medida que José Luis Martínez Almeida ya anunció en campaña para los establecimientos con 100 años de antigüedad, así como en el "IAE (Actividades Económicas), ICIO (Construcciones, Instalaciones y Obras) y las tasas que abonen por sus actividades". Este plan al que llamarán "Comercios con solera" implica también la "concesión de ayudas para su modernización e innovación".

Durante su discurso de investidura, la presidenta también solicitará a los ayuntamientos que "apliquen una rebaja en el impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, conocido como impuesto de plusvalía". Su aplicación, apuntan en el equipo de la presidenta, "beneficiará el ahorro a miles de familias, impulsando tanto el consumo como la inversión". La idea del gobierno regional es "reducir este tributo municipal que grava la revalorización de terrenos urbanos como viviendas y locales, y al que hacen frente todos los ciudadanos cuando se realiza una transmisión de la propiedad, ya sea por compra, donación o herencia". Según la explicación facilitada desde la Puerta del Sol, "el impuesto de plusvalía se aplica si el valor del activo inmobiliario se ha incrementado entre el momento de la compra y el de la transmisión. Se calcula usando unos coeficientes que determina el Estado cada año", pero "los ayuntamientos son los que establecen los valores máximos y sobre los que pueden establecen bonificaciones".