La propuesta popular para la Ley de Volcanes roza las firmas necesarias

La comisión promotora de la iniciativa avanza en su objetivo: alcanzar la cifra de 15.000 adhesiones

Volcán Tajogaite.

Volcán Tajogaite. / Europa Press

La comisión promotora de la iniciativa legislativa popular (ILP) de la llamada Ley de Volcanes prosigue su trabajo de recolección de las 15.000 firmas necesarias para su tramitación en el Parlamento, acercándose ya a ese objetivo tras un arduo trabajo por todo el Archipiélago.

Tras el paso por los municipios tinerfeños de Buenavista del Norte, Guía de Isora, Vilaflor, Granadilla de Abona, Garachico, Icod, Los Realejos y Güímar, las mesas informativas prosiguen en distintos puntos de La Palma con el objetivo de recoger al menos 15.000 firmas válidas para que el Parlamento canario apruebe una ley frente al riesgo volcánico, un objetivo que está cada vez más próximo.

Así, se afronta el mes de agosto con una cantidad cercana a las 14.000 firmas recogidas, aunque se pretende recabar muchas más que las requeridas para el trámite parlamentario, pues se contempla visitar incluso las islas de La Gomera y El Hierro, las únicas que faltan en su periplo por toda la comunidad autónoma.

La propuesta de ley, para la que la Mesa del Parlamento ha autorizado recabar firmas, recoge una serie de derechos para la población afectada por erupciones volcánicas futuras, pero también, con carácter retroactivo, para la de 2021 en el Valle de Aridane, con el fin de garantizar su recuperación socioeconómica.

El motivo de esta iniciativa ciudadana es la constatación, en esta catástrofe natural que ha golpeado a isla de La Palma, de que la legislación vigente no está pensada para dar una respuesta rápida y eficaz a las familias y empresas damnificadas.

La comisión promotora de la ILP está convencida de que su propuesta es de interés para todas las islas, en especial para aquellas en que puedan suceder nuevas erupciones volcánicas. En el caso de Tenerife, la planificación del riesgo aprobada por el Cabildo de esta isla contempla que más de 60.000 personas viven en zonas de amenaza alta o muy alta de riesgo volcánico.

Al pie de dorsales volcánicas que han registrado alguna erupción en los últimos miles de años en Tenerife se encuentra además toda la población de los valles de La Orotava y Güímar, y de municipios como Fasnia y Arico, en cuyas cumbres erupcionó en 1704-1705 un volcán, así como las comarcas de Icod, Isla Baja y, en el sur la zona que va de Guía de Isora a Santiago del Teide.

La última erupción que ha vivido Tenerife, la del volcán del Chinyero de 1909, apenas duró diez días y no ocasionó daños a la población, pero fue más explosiva de lo que se pensaba.

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