Kyle Guy, un fichaje del Lenovo Tenerife por ambición y no por necesidad

Con Kyle Guy ficha el CB Canarias con el objetivo principal de reactivar su plantilla y ganar en recursos en el perímetro. Pero lo hace sin más motivación que la de la ambición. Ante el discreto rendimiento de primeros espadas como, por ejemplo, Sasu Salin y Bruno Fitipaldo. Pero no por una lesión previa o por una desvinculación. Era ese motivo, el de los problemas físicos de algún integrante de su plantel, la razón para buscar en el mercado. Así ha sido, casi de forma milimétrica en estos 12 cursos consecutivos en la ACB.

Después de una 12/13 en la que el cuadro lagunero acabó la fase regular con los mismos hombres con los que la comenzó, los primeros movimientos en medio de un ejercicio se produjeron en la 13/14. Tras recurrir (aún en pretemporada) a Diego Fajardo por la lesión de Fotios Lampropoulos, el detonante fue la marcha de Blagota Sekulic a Turquía. La apuesta fallida por Lazaros Papadopoulos (un partido) acabó derivando en dos llegadas en apenas una semana: Carl English y Dan Kickert.

La variación de la 14/15 fue Xavi Rey, toda vez que el griego Michalis Tsairelis no terminó de dar el rendimiento esperado y fue cortado tras la jornada 21. Sería el propio Rey el que decidió salir en el tramo inicial de la 15/16, lo que unido al corte de Kerry Carter permitió las llegadas de Joseph Jones y Salva Arco. Las molestias físicas en el tramo final del ejercicio de Sekulic y de Davin White llevaron a hacer un esfuerzo con Djordje Gagic y Dani Pérez.

Varias lesiones también movieron el árbol en el Canarias de la 17/18. Primero las de Richotti y Grigonis, lo que derivó en una segunda etapa de Carl English, en esta ocasión para solo seis partidos. Semanas después, en la 12ª jornada, Javi Beirán se rompería el cruzado. Para tratar de paliar la baja del madrileño los elegidos fueron Taqwa Piñero y luego Tariq Kirksay.

Los problemas físicos del citado Richotti mediado el ejercicio 17/18 trajeron a la Isla a Josh Akognon, pero el norteamericano también se lesionó y el club lagunero tuvo que recurrir a Tobias Borg. Antes, la experiencia fallida de Adin Vrbac dejó una ficha libre que acabaría ocupando hasta el final del curso Kostas Vasileiadis. Precisamente en ese epílogo, Ferran Bassas se iba a perder un par de partidos y la solución de emergencia fue Pedro Llompart.

El movimiento más tempranero al que se ha visto obligado el CB Canarias en medio de una temporada fue en la 18/19. La grave lesión de rodilla sufrida por Tomasz Gielo en la primera jornada trajo a la Isla a Pierre Antoine Gillet. Luego, los problemas físicos y posterior marcha de Thad McFadden provocaron la vuelta de Davin White y el fichaje de Janari Joesaar.

No funcionó Darion Atkins en el arranque de la 19/20, por lo que se recurrió a un viejo conocido, Georgios Bogris. La inesperada espantada de Kyle Singler la tapó Lahaou Konate, mientras que la búsqueda por un sustituto de Pablo Aguilar (ni llegó a debutar de aurinegro por su lesión de muñeca) acabó con la llegada de Aaron White. Algo más tarde, la grave lesión de Santi Yusta volvió a obligar al CB Canarias, que realizó otro 2x1: llegaron Dino Radoncic y Nick Zeisloft, a los que la pandemia apenas les dejó rendir.

Bolmaro, el caso más parecido

Con Yusta fuera de combate en los primeros meses de la 20/21 y sin Dejan Todorovic, fuera todo el curso por una lesión en pretemporada, en la séptima fecha de la ACB llegó Spencer Butterfield. En el tramo final, con el equipo lanzado, y con los escoltas con numerosos problemas físicos (el propio Butterfield, Salin y Yusta fueron baja en un mismo partido), Charles Jenkins reforzó a los aurinegros en el tramo final.

Apenas hubo movimientos en la 21/22. Solo el de Julian Gamble, en la Isla menos de mes y medio, el tiempo que estuvo lesionado Gio Shermadini. Ya en la 22/23 llegó Dakota Mathias (solo jugó tres partidos) por las lesiones de los exteriores, mientras que un poco antes la salida de Iván Cruz dejó un hueco en el roster aurinegro. El CB Canarias se topó con una oportunidad de mercado, en condiciones normales casi imposible, se lanzó a ella y fichó a Leandro Bolmaro. Ahora, la llegada de Kyle Guy es lo más parecido a aquel movimiento de hace justo 10 meses.