LA DESPEDIDA MÁS EMOTIVA

Marc Márquez abandona Honda entre lágrimas, tras 11 años y 6 tìtulos juntos

Marc Márquez (Honda), el campeón más laureado y seguido de la parrilla de MotoGP, ha corrido hoy, en Cheste (Valencia), su última carrera a los mandos de una RC213V tras 11 años, 6 títulos, 59 victorias y la friolera de 101 podios. A partir del martes, MM93 será piloto de Ducati

Márquez hubiese querido acabar la carrera y entrar en su boxe, en su quería taller del 'team' Repsol Honda, montado en su RC213V nº 93, el año de su nacimiento, pero un impetuoso Jorge Martín provocó su caída y, por suerte, no le provocó lesión seria alguna

Marc Márquez dice adios a Honda con un casco donde da las gracias en castellano y japonés.

Marc Márquez dice adios a Honda con un casco donde da las gracias en castellano y japonés. / JESÚS ROBLEDO

Emilio Pérez de Rozas

Marc Márquez (Cervera, Lleida, 17 de febrero de 1993) se ha despedido hoy, en el Gran Premio de la Comunidad Valenciana, que ha tenido lugar en el circuito Ricardo Tormo, de Cheste, ante 80.000 espectadores, de su etapa más gloriosa y victoriosa, la que ha vivido, durante 11 temporadas (2013-2023), en el seno del que era hasta hace poco el mejor equipo del ‘paddock’ del Mundial de MotoGP, el Repsol Honda.

MM93 se va después de conquistar seis títulos mundiales de la máxima categoría (2013, 14, 16, 17, 18 y 19), 169 grandes premios, 59 victorias, 101 podios, 64 ‘poles positions’ y 59 vueltas rápidas, habiendo debutado en Catar-2013, habiendo conseguido su primera victoria en Austin (Texas, EEUU) en el 2013 y su última, en San Marino, en el circuito del desaparecido Marco Simoncelli, en el 2021.

Todo muy emotivo

Márquez, que lleva protagonizando “el fin de semana más emotivo de mi vida, con las lagrimillas colgando todo el día de mis ojos”, vivirá, el próximo martes, tal vez el segundo día más impresionante de su carrera cuando, por vez primera, se suba a una moto, la Ducati ‘Desmosedici’, que no tiene nada que ver con su ya viaje Honda RC213V, a la que abandona, precisamente, por su falta de competitividad. “No quiero ganar. No he cambiado de moto para ganar. He cambiado de moto para volver a divertirme, para que la sonrisa vuelva a mi cara. Solo divirtiéndome en la pista seré capaz de volver a ser el Márquez del 2019”, señala MM93 antes de probar la moto de Borgo Panigale.

Marc Márquez se despide de todo su equipo, en la fiesta que celebró, anoche, el 'team' Repsol Honda.

Marc Márquez se despide de todo su equipo, en la fiesta que celebró, anoche, el 'team' Repsol Honda. / ALEJANDRO CERESUELA

Márquez, que durante todo el fin de semana de Cheste luce un casco especial, con la palabra GRACIAS en japonés y castellano y con las seis fotos de sus seis títulos con Repsol Honda, reconoce haber protagonizado con su equipo de amigos, liderado por el técnico Santi Hernández, que no le acompañará en su nueva aventura “una historia increíble en los últimos 11 años, los buenos y los malos momentos me han ayudado a convertirme en quien soy y este fin de semana lo hemos disfrutado intensamente”.

 “El Repsol Honda Team ha sido y siempre será el equipo de mi carrera deportiva y de mi vida. He estado 11 años con ellos, donde hemos conseguido 6 títulos mundiales, no voy a conseguirlo con otro equipo. Tengo 30 años y la carrera deportiva de cualquier deportista o piloto, en este caso, dura lo que dura y será el equipo con el que haya conseguido más éxitos a nivel personal y a nivel colectivo”, ha comentado Márquez.

"Cambio de equipo y de moto porque quiero volver a disfrutar en la pista. No cambio de marca para volver a ganar. Solo cuando la sonrisa vuelva a mi rostro, podré volver a ganar"

Marc Márquez

— Piloto del equipo Repsol Honda

Y, claro, habla de su debut y su primera título mundial ya en su primera campaña. “Fue un debut soñado: primer año y ganar. Para mí fue el año más divertido porque había cero presión, todo valía y todo salía bien. Tuve la oportunidad de subir al equipo donde habían corrido mis ídolos, además de compartir box con uno de mis ídolos que fue, y es, Dani Pedrosa. A partir de ahí empezaron estos 11 años que, si lo valoras bien, han sido exitosos”.

También comenta que aquel Márquez no tiene mucho que ver con el actual. “Hemos aprendido más de los momentos difíciles y de los golpes que hemos recibido durante todos estos años, pero también hemos disfrutado y bailado mucho de los momentos buenos. No puedes comparar un chaval de 20 años con un “hombrecillo” de 30, con todas las ideas más claras y más maduro. He aprendido muchas cosas y la decisión que he tomado ahora con 30 años hubiera sido incapaz de tomarla con 20, 22, 23, 24 o 25 años porque no era suficientemente maduro para hacerlo”.

Marc Márquez es manteado por su equipo en Brno-2018.

Marc Márquez es manteado por su equipo en Brno-2018. / ALEJANDRO CERESUELA

Lo que no ha cambiado es su cosquilleo por seguir o volver a ganar. “No ha cambiado el carácter, la sonrisa y, sobre todo, la ambición, que sigue siendo la misma que cuando empecé. Estoy aquí para intentar ser el mejor en pista y para ello tienes que intentar buscar la mejor solución. Hay muchas veces que cuesta, pero no dormiría tranquilo si me retirara el día de mañana con dudas o con “¿y si hubiera hecho esto o lo otro?”. En todo momento soy un piloto que, tanto dentro como fuera de pista, hace lo que siente y lo que creo necesario para intentar luchar por los sitios de cabeza”.

Y, claro, da las gracias infinitas a todos los que le ayudaron a ser el mejor hasta el 2020, que empezaron a complicarse, muy seria y gravemente, las cosas. “Toda la gente que te está apoyando la valoras muchísimo, no solo en los buenos momentos, también en los malos y para mí no tiene sentido dar vueltas solo en el circuito, para mí tiene sentido la competición, crear emociones a la gente, ver el ‘paddock’ lleno, que venga una niña o un niño pequeño y se ponga a llorar o se quede parado, son reacciones que creas en la gente que nunca me hubiera imaginado. De pequeño te imaginas la vida de piloto, pero no te imaginas la vida de estrella”.

Marc Márquez dialogo con el mítico Giacomo Agostini, poseedor de 15 títulos mundiales.

Marc Márquez dialogo con el mítico Giacomo Agostini, poseedor de 15 títulos mundiales. / ALEJANDRO CERESUELA

Y, claro, también reconoce todo lo que echará de menos. “¿Qué echaré de menos del Repsol Honda? Lo echaré todo de menos, desde la entrada al box, hasta los colores, la gente, la moto… no he hecho nada más. Desde que entré en 2013 he estado con la misma gente, los mismos colores, el mismo box, con todo igual… la pregunta es qué no echaré de menos”.

No hay un solo habitante de los mil que están en el 'paddock' del Mundial de motociclismo que dude de que el mayor de los Márquez, aconsejado por su hermano pequeño Àlex, que ya ha triunfado (victoria al 'sprint', en Silverstone, Inglaterra este año), ha tomado una excelente aunque dolorosa decisión al dejar Honda y abrazar a la invencible Ducati 'Desmosedici'. Todos, todos, creen que la próxima temporada tendrá en MM93 a uno de sus más firmes candidatos al título mundial.

Qué difícil es ganar

"No pienso cometer el error de empezar a pensar y verbalizar esas cosas", ha asegurado Márquez a lo largo de este fin de semana en Valencia. "Llevo más de dos años sin ganar y todos vosotros ya comentais la posibilidad de que gane el título el año que viene. Por respeto a una parrilla que está repleta de campeones del mundo y, sobre todo, porque me conozco bien y conozco lo mucho que cuesta adaptarse y hacer tuya una moto, sé que me costará estar delante".

Márquez insistió que su reto, el cambio, su dolorosa decisión gira alrededor de "volver a sentirme piloto de carreras, un piloto ganador. Ese es el reto: saber si estoy o no entre los mejores. Hasta ahora, la moto no me acompañaba. Ahora voy a subirme a la moto que gana y, por tanto, es el momento de saber si soy yo o la moto, si empiezo a tener problemas para pilotar a la altura que requiere este campeonato. Es un reto e, insisto, ganar ahora no es nada fácil. Este año han habido hasta ocho pilotos que han ganado, al menos, un gran premio (Bagnaia, Martín, Bezzecchi, Zarco, Aleix Espargaró, Di Giannantonio, Rins y Bastianini), lo que demuestra lo difícil que es vencer".