Teatro

José Padilla: "La figura del tinerfeño Ángel Guimerá estará muy presente en la gala de los Max"

"Premio Max es un guiño para pensar que no lo estas haciendo del todo mal"

José Padilla.

José Padilla. / @lachulareels

Almudena Cruz

Almudena Cruz

El director y dramaturgo tinerfeño José Padilla ha sido designado por el comité organizador para dirigir la próxima edición de los Premios Max de las Artes Escénicas, que tendrán lugar el próximo 1 de julio en el Auditorio de Tenerife. Ganador de dos de estos importantes reconocimientos, asume esta responsabilidad con ilusión, responsabilidad y con el objetivo de diseñar un espectáculo profundamente canario.

Supongo que encara la dirección de la ceremonia de los Premios Max como una gran responsabilidad.

Me hace una ilusión enorme y es una responsabilidad colosal, pero creo que también es una oportunidad única. Siempre he dicho que los Premios Max son el punto de encuentro, una oportunidad única para que esa unión de nuestra profesión revierta a la vez en el público y más con una difusión como tienen los Premios Max, que no se ven en una sola España, sin alrededor de todo el mundo. Atendiendo a eso, sí, me siento responsable y también me dan unas enormes ganas de compartir y de crear y de hacer un homenaje a todo creador y creadora de España.

Además, son unos premios especiales para usted como dramaturgo y director. Tiene dos en su poder...

Sí, eso es. Los Premios Max han estado muy presentes desde mis inicios profesionales y eso me ha llenado siempre de una felicidad inenarrable. De alguna manera , estos premios vienen a corroborar que el camino emprendido es el correcto. Eso, claro, no significa que si eso no lo consigues no estés en la senda en la que tienes que estar, pero son un acicate para continuar y para seguir hacia adelante. Un Premio Max es un guiño muy potente para pensar, como mínimo, que no lo estás haciendo del todo mal.

Encima le escogen para dirigir justo la gala que se celebra en su ciudad natal, en su Isla, que es un espacio que usted reclama desde hace mucho tiempo con su trabajo.

Cuando me llamó el comité organizador lo sentí como un honor enorme. Encima, que se dé la circunstancia de que este año la ceremonia tenga lugar en Santa Cruz es algo que multiplica todo lo bueno por mucho, por muchísimo. Es difícil de expresar toda la ilusión que me hace. Si me llamaran para dirigir la gala de los Max en cualquier sitio de España que no fuera Tenerife, por supuesto, lo asumiría con toda la alegría del mundo. Pero el hecho de que sea Santa Cruz de Tenerife multiplica todo lo bueno exponencialmente a unos niveles que son difíciles de expresar con palabras. 

¿Cuál es el principal desafío? En este tipo de ceremonias suele ser conseguir la agilidad y la fluidez que hagan compatible el reconocimiento de los galardones con su vertiente de espectáculo televisivo.

Dices bien. Todos entendemos lo que es una gala, pero a la hora de organizarlo es algo bastante abstracto. Tengo que dotarlo en una narrativa y que ésta sea atractiva, que sea entretenida y que efectivamente tenga fluidez. Ese es el objetivo: se trata básicamente de poder compartir algo con toda la gente que está en el recinto y con todos los espectadores que nos estén viendo por televisión y que a la vez sea fluida, sea dinámica y que contemos lo que tenemos que contar. No tenemos cortapisas, pero la ceremonia tiene que responder a eso.

¿Y qué le parece el Auditorio de Tenerife como sede para esta ceremonia?

Es un espacio de unas cualidades enormes. A nivel de puesta en escena –y voy a usar el verbo condicionar pero para bien– el Auditorio te condiciona, hace que te afiles como creador para utilizarlo a tu favor porque te ofrece unas formas de ver el escenario que otros recintos no poseen. Todas esas características las vamos a utilizarlas a favor de esta narrativa que estaba mencionando.

¿Y va a poder darle un toque aún más canario a esta gala? 

Sin duda. Vamos, que nadie tenga la menor duda. Habrá mucha presencia canaria en la gala y no solo por mí y por el espacio y la Isla. Siempre, muchísimo antes incluso de dedicarme a las artes técnicas, he opinado que en Canarias la creatividad rezuma como en muy pocos lugares alrededor del mundo. Esto es una oportunidad de que eso se deje ver y los creadores y las creadoras canarias tendrán un lugar protagonista, por supuesto. Además, Ángel Guimerá, que es una figura troncal de nuestra cultura tinerfeña va a estar muy presente. De hecho, ese mismo mes se cumplirán 100 años de su fallecimiento.

Una de sus producciones también figura en la lista de preseleccionados para los galardones en esta edición...

Sí, Cuatro salvajes vestidos de verde hiedra, obra que escribí y que dirijo. Y también hay otro tinerfeño, el actor Kevin de la Rosa. La gala va a ser una invitación muy poderosa a que los tinerfeños nos hagamos dueños de toda la enorme creación canaria que existe tanto dentro como fuera de las Islas y que es ingente. 

La ceremonia de los Max tendrá lugar el próximo 1 de julio. ¿Cuál es el cronograma de los preparativos hasta entonces?

Hace poco estuve en una visita técnica al Auditorio. Ya estoy metido de lleno en el trabajo, sobre el terrero, porque esto tiene muchísimos vectores que compatibilizar. No es solo un espectáculo para la gente que nos acompañará esa noche en el Auditorio, que también, sino que no nos podemos olvidar de que es algo que va a ver todo el país a través de la televisión. Estamos muy en sintonía con esa característica que la gala de los Max tiene y que otros eventos no. Ya llevo un tiempito diseñando esto, coordinándome con los distintos equipos, que son impresionantes.

Y todo eso en medio de su ya de por sí frenética actividad laboral...

(Risas) Eso va de serie, por fortuna. Tengo proyectos en marcha, estaba y estoy preparando cosas para la temporada que viene, pero bueno, esto es una añadidura que no me asusta ni me preocupa. Se puede encajar perfectamente y es un placer que en ninguno de los casos supone el menor de los problemas.