La casa de La Laguna que se derrumbó se construyó sin licencia

La segunda planta de un inmueble que se cayó en el barrio de San Matías, en La Laguna, carecía de licencia urbanística y las obras allí ejecutadas tendrán que ser demolidas al existir «una situación de ruina inminente» y ser posible «su colapso». Así lo recoge una resolución del Servicio de Disciplina de la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de La Laguna. Todo ello se produce tras el derrumbe del pasado martes.

El documento establece que el inmueble «deberá permanecer desalojado y cerrado, tal y como le fue informado al propietario el día de la visita». En cuanto a los trabajos de demolición, precisa que se tendrá que procede a la retirada del techo de la planta baja y, por tanto, de la vivienda en construcción existente sobre este; del forjado de la segunda, y de la fachada de esa misma planta, así como al desmontaje de la estructura situada sobre el forjado realizado en la parte trasera del inmueble. También se requiere eliminar un techo realizado por detrás y el tapiado del acceso a la planta alta del inmueble afectado, mediante la realización de un muro.

Se derrumba parte de una edificación en La Laguna solo unos meses después de su construcción

Como se recordará, en la construcción se produjo un colapso parcial de su estructura. Hasta el inmueble, «aparentemente de uso industrial», se desplazaron diferentes medios de la Policía Local de La Laguna, la Gerencia Municipal de Urbanismo, el Consorcio de Bomberos de Tenerife y, de manera preventiva, una unidad del Servicio de Urgencias Canario, según informó el Ayuntamiento de La Laguna a través de una nota de prensa tras los hechos.

«Para la realización de las medidas cautelares se deberá aportar un proyecto de demolición redactado por un técnico competente, para su previa aprobación antes del inicio de los trabajos», recoge el documento. «Dichos trabajos serán dirigidos por técnico competente, el cual, una vez finalizados, presentará un informe en esta Gerencia certificando la correcta ejecución de los mismos», añade la resolución.

Más en detalle, y siguiendo el mismo escrito de la Gerencia de Urbanismo de La Laguna, para el desalojo y cierre del inmueble se establece un plazo de un día; para la entrega del proyecto de demolición se estima otro de 20, y para la realización de las medidas cautelares se calcula un período de un mes, contado a partir de la notificación de la aprobación del Proyecto de demolición.

Cabe destacar que, en cuanto a las edificaciones colindantes (situadas una en el número 31 de la calle San Bartolomé y otra en el 14 de San Ramón) «se realizó una inspección ocular prestando especial atención a la estructura, los cerramientos y las carpinterías, no encontrándose patologías que pudieran estar relacionadas con el objeto de este informe, por lo que no se apreció riesgo».

Nadie en el interior

Tras lo sucedido el martes, el concejal lagunero de Ordenación del Territorio y consejero director de la Gerencia de Urbanismo, Adolfo Cordobés, había informado desde la zona del colapso que se había acordonado «un perímetro lo suficientemente amplio para garantizar la seguridad de las personas». Asimismo, señaló que «testigos presenciales aseguran que no había nadie en el interior en el momento del siniestro, si bien se están realizando las actuaciones necesarias para garantizar esta circunstancia».

«Los propietarios y vecinos de las viviendas colindantes han facilitado su desalojo voluntario y han confirmado que no requieren de alojamiento alternativo por parte de los servicios del Ayuntamiento, tal y como se les ha ofrecido», manifestó Cordobés en aquellos primeros momentos. El edil avanzó que personal de la Gerencia de Urbanismo de La Laguna empezó a continuación con los trabajos de inspección, que son los que ahora han desembocado en el pronunciamiento de este organismo autónomo del Consistorio lagunero.