La procesión de La Macarena y El Cautivo vienen a ser a la Semana Santa lo que la final de murgas al Carnaval: el acto más multitudinario. El adelanto horario que se impuso el año pasado a este recorrido no resta un ápice la participación en esta ‘madrugá’ chicharrera que desborda el corazón del casco antiguo de la ciudad aunque arranque a las ocho y media del Jueves Santo en vez de a las diez de la noche como era tradición.