Organiza tu armario como un profesional: descubre los diferentes tipos de perchas y sus usos

Mantener un armario ordenado y funcional es clave para cuidar nuestras prendas y facilitar nuestra rutina diaria. Uno de los elementos esenciales para evitar que la ropa no sólo se arrugue, sino que también para impedir que se deforme son las perchas. Estos artilugios permiten colgar casi cualquier cosa, lo que nos permite liberar espacio en los cajones. No obstante, hay que evitar sobrecargar el armario, es decir, hay dejar espacio entre las prendas para que puedan respirar. Para evitar que la ropa coja mal olor, lo único que hay que hacer es ventilar el armario. ¿Cómo? Sólo hay que abrir puertas y ventanas durante unos minutos y, al menos, una vez por semana. Esto permitirá que circule el aire fresco y se eliminen posibles olores y humedad. Además, puedes colocar saquitos de tela con fragancias naturales para mantener el armario fresco y libre de olores desagradables.

Aparte de airear el armario, hay que tratar de mantenerlo en orden. Para ello, se recomienda no sólo deshacerse de aquellas prendas que estén en mal estado, sino también utilizar cajas de almacenamiento y organizadores para maximizar el espacio. Otra buena opción es hacer un cambio de armario con la llegada del verano y del invierno.

Tipos de perchas: materiales y usos

La percha es uno de esos elementos que nos ayudan a mantener el orden dentro del armario, pero no todas valen para lo mismo. Existen muchos tipos de perchas y fabricadas con distintos materiales, por lo que hay que saber elegir cuál es la más apropiada en función de la prenda que vayamos a colgar en el armario. Estos son las clases de perchas más utilizadas:

• Perchas de madera: clásicas y duraderas, ideales para prendas pesadas como abrigos y chaquetas. Ofrecen resistencia y un toque de elegancia al armario.
• Perchas de plástico: económicas y versátiles, adecuadas para una amplia variedad de prendas, como camisas o pantalones. Su ligereza las hace ideales para un uso general.
• Perchas de terciopelo: perfectas para prendas delicadas como blusas y vestidos. Su superficie suave y antideslizante evita que la ropa se resbale y se dañe.
• Perchas con pinzas: este tipo de perchas son ideales para colgar pantalones o faldas.
• Perchas para corbatas: permite ahorrar espacio en el armario.

Pese a que existen diferentes tipos de perchas para colgar la ropa, lo cierto es que no todas las prendas se pueden colgar. Un ejemplo de prenda que no se debe colgar en una percha son los suéteres, pues se pueden llegar a deformar. En este caso es mejor doblarlos y almacenarlos en estantes o cajones.