El fiscal pide 21 años de cárcel al acusado de asesinar a su padre en Los Abrigos

El Ministerio Público estima que el presunto autor, que sufre problemas pisquiátricos desde que era un joven, le propinó a su progenitor 54 puñaladas el 1 de julio de 2020

Palacio de Justicia de Santa Cruz de Tenerife. | | E.D.

Palacio de Justicia de Santa Cruz de Tenerife. | | E.D. / Pedro Fumero

La Fiscalía solicita 21 años de prisión para un hombre que presuntamente asesinó a su padre en la vivienda de este último el 1 julio de 2020 en la localidad de Los Abrigos, en el municipio de Granadilla de Abona. La primera sesión del juicio con Tribunal de Jurado que se celebrará en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife tendrá lugar el viernes de la próxima semana, 17 de marzo.

El implicado en esta muerte violenta llegó a Tenerife poco antes del trágico suceso procedente de Estepona (Málaga), donde residía en compañía de su madre. El objetivo era pasar una temporada junto a su progenitor, que tenía su domicilio en el núcleo costero de Los Abrigos. Este ciudadano británico poseía una empresa de jardinería y pretendía que su hijo trabajara con él durante algún tiempo.

Sin embargo, el padre y el hijo mantuvieron una discusión por cuestiones domésticas en el domicilio del primero. Según la información recabada por el Equipo Territorial de la Policía Judicial de la Guardia Civil del Sur de Tenerife y el Equipo de Delitos contra las Personas de dicho cuerpo, el ahora acusado, que continuaba enfadado con su progenitor, al día siguiente, con la intención de acabar con su vida, cogió un cuchillo de 15 centímetros de largo y aproximadamente cuatro de ancho.

Sin que la víctima tuviera posibilidad de defenderse, el presunto autor se lo clavó en un total de 54 ocasiones, siete de ellas en el cuello y el tórax, cuatro en el brazo izquierdo y 43 en la espalda. Estas últimas heridas de arma blanca se registraron cuando el afectado yacía en el suelo indefenso, boca abajo, sin posibilidad alguna de defensa o supervivencia. De esta manera, según el escrito de calificación del fiscal, se aumentó de forma innecesaria el dolor de la víctima mientras agonizaba.

El acusado fue diagnosticado de esquizofrenia paranoide a los 18 años y tiene reconocida una discapacidad psíquica del 67 por ciento. En los años previos al presunto ataque a su padre, había sido tratado por la Unidad de Salud Mental del Hospital Universitario Virgen de La Victoria, en Estepona. De hecho, meses antes de que llegara a Tenerife, ante la sospecha de una descompensación psicótica de su patología, se prescribió al paciente un aumento de la dosis de un fármaco.

Según los médicos forenses del Instituto de Medicina Legal de Santa Cruz de Tenerife, en el momento del asesinato, el presunto autor pudo sufrir «cierta descompensación psiquiátrica, que pudo afectar», al menos levemente, su capacidad para comprender la ilicitud del hecho y para obrar de manera acorde a dicha comprensión.

El Ministerio Público también reclama que los otros dos hijos de la víctima, que residen en el Reino Unido, sean compensados con 300.000 euros por parte del ahora acusado.

Para la Fiscalía, en este episodio de violencia doméstica concurre la agravante de parentesco, a la vez que la circunstancia modificativa de la responsabilidad criminal de alteración psíquica.