La Dirección General de Tráfico (DGT) ha expresado su preocupación por la seguridad de los vehículos de dos ruedas, especialmente después de que 299 motoristas perdieran la vida en accidentes de tráfico en 2023, marcando las cifras más elevadas en la última década.

En respuesta a esta preocupante estadística, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha anunciado dos medidas clave para combatir la mortalidad en el colectivo de motoristas. La primera de ellas será la obligatoriedad de llevar guantes homologados. La segunda medida destacada será el uso exclusivo de cascos integrales o modulares en carretera, lo que efectivamente prohibirá el uso de cascos abiertos tipo jet en las vías españolas.

Aunque la fecha exacta de la implementación de estas directrices aún está pendiente de confirmación, la noticia ha generado interrogantes entre los usuarios de motocicletas y ciclomotores sobre qué tipo de casco podrán llevar una vez que se apruebe la normativa.

Los expertos insisten en que la elección del casco es fundamental para la seguridad del motorista.

Cascos integrales

Cascos integrales El Día

Los cascos integrales son considerados los más seguros, ya que cubren toda la cabeza y están fabricados en una sola pieza, reduciendo la posibilidad de fracturas en caso de accidente. También proporcionan mayor protección contra el frío, la lluvia y ofrecen una mejor insonorización.

Cascos modulares

Cascos modulares El Día

En cuanto a los cascos modulares, que son legales en la actualidad y lo seguirán siendo, son ideales para aquellos que prefieren la versatilidad. Sin embargo, será necesario que la mentonera esté abatida y homologada para su uso en carretera.

Cascos jet

Por otro lado, los cascos jet dejarán de ser legales con la aplicación de las nuevas medidas. Aunque algunos motoristas prefieren su comodidad, estos cascos ofrecen un nivel de protección más básico, dejando la zona de la nuca y el rostro desprotegidas.

Para evitar multas de hasta 200 euros, se aconseja a los motoristas verificar que sus cascos estén homologados según la normativa más reciente, la ECE 22-06. Esta actualización implica un aumento de los puntos de control de impacto de 6 a 12, garantizando una mayor seguridad en caso de accidente.