Los termómetros en Canarias marcarán dos grados más de lo habitual este agosto

Las temperaturas rozan los 40 grados en Canarias en el último episodio de altas temperaturas de julio

El alisio soplará con fuerza y provocará un intenso oleaje hasta el jueves

Verónica Pavés

Verónica Pavés

Este agosto en Canarias será más caluroso de lo normal. Durante el mes más caluroso del verano, los termómetros marcarán entre uno y dos grados más de lo habitual, tal y como ha adelantado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Una circunstancia que dará así continuidad a una tendencia que se ha prolongado durante todo el año en Canarias, que ha sido en general más caluroso de lo que acostumbra.  

Como preludio de esta situación meteorológica, Canarias atraviesa un corto pero intenso episodio de altas temperaturas, que comenzó este domingo y se extenderá hasta mañana. Será el último episodio de altas temperaturas de julio. Este incremento térmico, sin embargo, tiene menor entidad que las dos olas de calor previas vividas en las Islas durante el mes de julio. 

El nuevo aumento de temperaturas en Canarias tiene su origen en una situación meteorológica habitual del verano, tal y como concluye Víctor Quintero, delegado territorial de la Aemet en Canarias. La orientación y posición del anticiclón de las Azores, que ha oscilado entre el archipiélago portugués y la Península, es lo que ha generado un flujo de aire –alisio– del nordeste que, en su recorrido por el continente africano, arrastra calor y polvo en suspensión hasta Canarias. Sin embargo, el calor no ha sido tan intenso como en otras ocasiones porque el viento también ha recogido parte del frescor marítimo. "Si se tratase de viento del este sería más cálido, pero al ser nordeste también tiene influencia oceánica", explica.  

El día más caluroso de este nuevo episodio de altas temperaturas se registró este lunes. De forma puntual, se marcaron valores cercanos a los 40 grados y en varios puntos del sur de las islas y de la zona metropolitana, como es el caso de Tenerife, se superaron los 30 grados. En las islas verdes (El Hierro, La Palma y La Gomera) y el norte de Tenerife, las temperaturas se situaron de manera generalizada por encima de los 25 grados, pero no superaron en ningún caso los 30. 

La estación meteorológica que ha registrado la temperatura más alta durante la jornada ha sido la de San Bartolomé de Tirajana, al sur de Gran Canaria, en la que se han alcanzado 39,3 grados poco después del mediodía. Le siguió Tejeda, en el este de Gran Canaria, con temperaturas máximas de 36,8 grados. Ambos enclaves se encuentran afectados por el aviso amarillo por altas temperaturas decretado por la Aemet, al igual que el sur de Tenerife y Fuerteventura. Estos avisos meteorológicos se mantendrán activos hasta este martes. 

En Tenerife la temperatura máxima se registró en Santa Cruz, donde los termómetros alcanzaron los 32,6 grados. Le siguió el aeropuerto de Tenerife Sur donde el intenso calor provocó que la estación meteorológica alcanzara los 32,4 grados. En Fuerteventura las temperaturas más altas se registraron en el sur de la isla, zona en la que se superaron los 32 grados, tanto en el municpio de Tuineje como en el de Pájara. 

El calor se disipa

El calor empezará a disiparse a partir de este martes gracias al cambio de orientación del alisio, aunque el fresco no llegará por igual a todas las islas. "Hay vertientes, como la cuenca suroeste de Gran Canaria, en la que el aire caliente se estanca y, por lo tanto, tardará más en refrescar", explica Quintero. La orografía escarpada de la zona, formada por grandes barrancos, no ayuda a disipar el aire caliente que se acumula en los días de mayor calor. 

Se mantendrá, no obstante, el fuerte viento asociado a él, lo que generará un fuerte oleaje y mala mar. La Aemet por ello mantiene los avisos amarillos por fenómenos costeros "en los canales de la isla occidentales" al menos hasta el miércoles, aunque no descarta mantenerlos hasta el jueves. El viento soplará en el mar a entre 50 y 61 kilómetros por hora –equivalente a fuerza 7–, lo que creará una intensa marejada.

Durante el resto del mes, "el anticiclón irá oscilando entre diferentes posiciones que son propias del verano", explica Quintero. Sin embargo, las temperaturas no gozarán de esa situación de normalidad. "Preveemos que el mes acabe con una anomalía de entre uno y dos grados más de lo habitual, como ha ocurrido el resto del año", señala Quintero.