Función Pública activa el protocolo de acoso por la denuncia contra Morera

Función Pública activa el protocolo de acoso por la denuncia contra Morera. La Dirección General de la Función Pública ya ha activado el Protocolo de Actuación ante Situaciones de Acoso en el Entorno Laboral de la Administración Pública tras la denuncia de nueve especialistas en Neurocirugía del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín contra el jefe del servicio, Jesús Morera, por un presunto caso de acoso laboral. Acusan al ex consejero de Sanidad de protagonizar conductas agresivas, humillaciones y ejercer abuso de poder.

 El protocolo contempla una línea específica para el Servicio Canario de la Salud (SCS). De este modo, la evaluación de los hechos correrá a cargo del comité que se está conformando tras la puesta en marcha del protocolo y que será el encargado de valorar la situación tras oír la versión de los denunciantes y del propio denunciado. Un proceso que se puede alargar en el tiempo. 

La puesta en marcha del protocolo llega casi un mes después de los hechos denunciados y tres semanas después de que se hiciera público el escrito presentado por dichos especialistas a la Gerencia del citado centro hospitalario y a la asesoría jurídica del mismo exigiendo su cese. 

El retraso viene derivado por la tardanza de los nueve especialistas denunciantes a la hora de presentar el formulario necesario que permite activar el Protocolo de Actuación ante Situaciones de Acoso en el Entorno Laboral de la Administración Pública, que ya se ha puesto en marcha y que será clave para esclarecer lo ocurrido.

Denuncia

En el texto trasladaron una situación de «acoso laboral» prolongada y continua. En la denuncia de acoso laboral que lleva la rúbrica de la totalidad de adjuntos al área, se describe el incidente difundido a través de las redes y que ocurrió el viernes, 10 de febrero. Ese día, se sostiene en el texto que el jefe de Neurocirugía «gritó y abusó verbalmente de una adjunta al servicio». Además, no respetó el turno de palabra durante una conversación y tuvo un comportamiento «no verbal intimidatorio». Esta situación le causó una crisis de ansiedad a la neurocirujana, que tuvo que acudir al servicio de Urgencias. Los médicos determinaron que debía guardar reposo en su domicilio, por lo que fue necesario suspender las guardias que tenía programadas durante el fin de semana. Otras de las vivencias detalladas en la carta son las críticas destructivas, las descalificaciones, las llamadas de atención en público y el abuso de poder y de la autoridad. Todo esto ha tenido repercusiones en la salud mental de los afectados, pues en base al escrito, la mitad del servicio ha padecido o padece ansiedad o trastornos del sueño. 

Las presuntas actitudes y comportamientos agresivos también forman parte de la denuncia. En concreto, los neurocirujanos describen un suceso acontecido el 16 de noviembre del pasado año, cuando el doctor Jesús Morera tuvo una discusión con una médica adjunta en el marco del comité de Neurooncología. ¿La razón? Disparidad de opiniones. Atendiendo al documento, el siguiente paso fue gritar y abandonar la sala dando un portazo que bloqueó la puerta y dejó encerrado a todo el personal médico. 

Por todo lo relatado –y por otras ocasiones insostenibles que dicen que no se recoge en la carta–, los neurocirujanos decidieron plantarse ante la gestión de su jefe y piden a la Gerencia su destitución del cargo. 

Durante este proceso el Sindicato Profesional de Médicos de Las Palmas (Spmlp) ha permanecido en guardia para que no se tomasen represalias contra los nueve médicos adjuntos al servicio de Neurocirugía que denunciaron el presunto caso de acoso laboral humillaciones y abuso de poder por parte del jefe del área, el doctor Jesús Morera. Además, han mostrado su apoyo y asesoramiento a los nueve especialistas denunciantes.

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