El PSOE de Santa Cruz asegura que un informe advirtió del riesgo que existía en la fiesta de Nochebuena que acabó en avalancha

El edil Guzmán Plasencia denuncia que el Consistorio no actuara de manera preventiva

Las imágenes de la avalancha en una fiesta de Nochebuena en Tenerife

E. D.

El PSOE acusa al Ayuntamiento de Santa Cruz de permitir la celebración de la polémica fiesta de Nochebuena en la sala Dubai, ubicada en El Mayorazgo, a pesar de saber que ésta «pondría en peligro» a los asistentes. El edil socialista Florentino Guzmán Plasencia indica que horas antes de que se llevara a cabo la fiesta, que acabó en avalancha, la Policía Local emitió un informe «detallado» en el que se advertía que se iba a superar el aforo autorizado, que el local no era apto para la celebración de la misma y que existía un «riesgo grave» para los clientes. Plasencia señala que la Gerencia de Urbanismo recibió el informe y una llamada de la Policía el mismo 24 de diciembre, antes de que se abrieran las puertas del establecimiento «y con la suficiente antelación para poder evitar que se llevara a cabo el evento».

«Con el informe del 24 de diciembre sobre la fiesta en la sala Dubai se acredita fehacientemente que la Policía tenía conocimiento de que el aforo se iba a duplicar y lo comunicaron a Urbanismo. Se podría haber actuado y no se hizo nada, sabiendo que podían haber evitado poner en peligro a cientos de jóvenes», apunta el concejal del PSOE. Éste manifiesta que una actuación preventiva por parte del Ayuntamiento, ya fuese a través de Urbanismo o de la propia Policía, hubiese resultado «vital» a la hora de haber evitado «cualquier situación de riesgo para la integridad de las personas asistentes». Sin embargo, añade Plasencia, «la intervención policial se produjo precisamente tras la estampida, donde se produjeron desmayos y multitud de ataques de ansiedad». «Se había triplicado el aforo, poniendo en riesgo la vida de muchas personas».

Urbanismo indica que el informe llegó el 26 de diciembre y los socialistas indican que el 24 ya lo tenían

En el informe que elaboró la Policía horas antes de la fiesta se establecía que el local «no contaba con los requisitos mínimos de seguridad», señalando, incluso, que «estaba provisto, en toda sus extensión, de cortinas de tela susceptibles de tener reacción al fuego». Fuentes municipales quieren aclarar que dicho informe entró en la Gerencia de Urbanismo el 26 de diciembre. Sí se reconoce que hubo una llamada relacionada con el aforo del establecimiento, pero desde Urbanismo se explica que la Gerencia no puede suspender un evento hasta que no se produzcan los incumplimientos. Sin embargo, el edil Plasencia, que ya ha anunciado, tal y como lo adelantó ELDÍA, que ha llevado toda la información al respecto ante la Fiscalía, comenta que existen dos informes iguales con firmas de distintas fechas, del 24 y del 25 de diciembre, que, «cuanto menos, es sospechoso». «Lo que está claro es que tanto la Policía como Urbanismo sabían que esa fiesta podría suponer un riesgo para los asistentes y no se hizo nada por ninguna de las partes. Y, afortunadamente, no ocurrió una desgracia mayor», manifiesta.

Una vez iniciada la fiesta, la Policía la suspendió y desalojó el local al comprobar que se había superado el aforo en un 415%, pues sólo se había autorizado, por parte de Urbanismo, 150 personas y había 665 jóvenes en el interior del establecimiento. A raíz de dicha intervención se realizó otro informe, que llegó a Urbanismo el día 27, a raíz del cual se han abierto dos expedientes sancionadores, uno de 30.000 euros por incumplimiento de aforo, cuya tramitación ya ha finalizado, y otro de 78.000 euros por otras cuatro infracciones. Éstas se refieren al desarrollo de una actividad sin licencia, al incumplimiento del deber de contratación de personal habilitado de control de acceso, al mal estado de local, y a la «falta de carteles que anuncien la prohibición de entrada de menores».