La temperatura de las coladas y los tubos volcánicos del volcán de La Palma altera la planificación viaria

Las altas temperaturas de las coladas y los tubos volcánicos que aún continúan activos están obligando a modificar los planes y trazados de las vías que unirán sobre la lava distintos puntos del Valle de Aridane. Así lo confirmó el consejero insular de Infraestructuras, Borja Perdomo, quien puso de relieve que los estudios geológicos de la propuesta del trazado entre La Laguna y Las Norias, que atraviesa las coladas, revela datos que están forzando a cambiar las planificaciones. Se trata de estudios realizados para poder ejecutar con seguridad las obras y elegir los lugares por donde se rehabilitarán esos caminos. De esa manera, Perdomo señaló que la situación actual es que el mapa de temperaturas de esas coladas y de los posibles tubos volcánicos que puede haber en la zona «no es el que nos hubiera gustado ver».

El consejero lamentó que en las reuniones que se realizan con vecinos, se han mostrado esos mapas, «quedando los afectados sorprendidos de cómo se encuentran las coladas ahora». Se refiere Perdomo a que en la zona entre Todoque y La Laguna, «aparte de tener una gran aportación de material, las temperaturas a un metro de profundidad son de casi 320 grados», recalcando que a cada metro más que se excava, la profundidad se multiplica.

En las labores para ejecutar caminos y recuperar la conectividad de fincas y casas aisladas entre coladas, se procede al desmonte de parte del terreno para contar con superficie firme, lo que genera que a cada metro encuentren con dificultades que obligan a paralizar el tajo. «Es difícil trabajar con esas temperaturas», señala Perdomo, quien recalca que no esperaban que esos mapas de temperaturas y tubos volcánicos «no denotaran que el interior de las coladas estaba caliente aún», dijo.

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Respecto a los tubos volcánicos, se refirió a que los que más aportación han tenido durante toda la erupción y los más activos, «que son los más peligrosos», están en la franja entre el Cementerio de Las Manchas y la zona de Todoque. Es en esa zona donde se está focalizando el trabajo para intentar desviar el trazado la carretera que unirá Las Laguna con Las Norias y acometerla con las mayores garantías de seguridad. Para ello, se está revisando el trazado junto a los científicos para rediseñar la futura vía, «aunque haya que acercarla a la zona de la costa, lo que será la solución más factible para empezar los trabajos».

Ahora, al contar con esos mapas, señaló que se trabaja para definir ese trabajo «y arrancar las obras cuanto antes», con la esperanza de, una vez definido el trazado, informar a los vecinos, «ya que habrá que expropiar terrenos», se puedan comenzar.

Borja Perdomo recalcó que se realizan mediciones continuas de emisiones de gases y temperatura de las coladas, que en muchas zonas continúa superando con creces los 900 grados. Esta monitorización la realizan científicos del Instituto Geográfico Nacional (IGN), encargados de vigilar los comportamientos del volcán.

El consejero de Infraestructuras advierte que va a ser necesario expropiar terrenos

Tres meses y medio después de dar por concluido el proceso eruptivo, sigue habiendo restos de lava casi superficiales que se acercan a los 1.000 grados, registrados por las cámaras termográficas de los científicos, lo que hace peligroso transitar sobre estas coladas y, sobre todo, la intervención para la recuperación de caminos y carreteras. Además, también son comunes las emisiones de gases tóxicos detectados en varios puntos de las coladas y la presencia de material extremadamente caliente bajo la corteza ya solidificada.

Perdomo informó que se sigue limpiando la lava de toda la zona del colegio de La Laguna que no se vio afectada por el avance de las coladas. «El colegio habrá que demolerlo porque la lava derrumbó parte de la estructura», concluyó.

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