Luis Miguel Ramis no se quedó con ganas de más en el mercado de fichajes clausurado el martes. Ni siquiera echa en falta la presencia en el grupo de otro delantero, objetivo por el que trabajó Juan Carlos Cordero hasta el último minuto. El entrenador confirmó ayer que su satisfacción con los futbolistas que tiene es «alta», y aseguró que «la plantilla no está coja».

En líneas generales, el técnico del Tenerife se mostró «contento» con el resultado de las gestiones realizadas por el director deportivo. Opinó que la plantilla «es mejorable, como todas», pero afirmó que «no quedó coja» ni en la delantera ni en otras demarcaciones. «Tenemos a los jugadores que queríamos», remarcó antes de poner el ejemplo de que hasta cuatro delanteros estuvieron «tocando la puerta» del Tenerife en la parte final del mercado. «Pero no eran lo que necesitábamos», añadió Ramis, que cuenta con Enric Gallego, Elady, Manu Apeh, el canterano Ethyan e incluso Mollejo para ocupar el puesto de delantero.

En el apartado de salidas, el tarraconense fue cuestionado sobre la que no se produjo, la de Alberto Jiménez. Para empezar, indicó que el majorero ya sabe cuál es el papel que le espera y advirtió de que «la pelota está en su tejado». 

Ramis garantizó que tratará a Alberto con «muchísimo respeto», entre otras cosas porque es un integrante más de la plantilla. «Ha estado entrenando con nosotros desde el primer día y lo seguirá haciendo. Yo no cierro ni tiro a nadie a ningún lado. Pero él sabe qué tiene que hacer y cómo debe responder. Esa es mi responsabilidad deportiva. A partir de ahí, el balón está en su tejado. Es él quien tiene que intentar poner una solución», argumentó el entrenador.

Sin cambiar de protagonista, aunque extendiendo su mensaje a cualquier jugador blanquiazul, advirtió de que no tiene la intención de «regalar nada a nadie, tenga la edad que tenga y sea de donde sea». En ese aspecto, señaló que todos los futbolistas se tienen que ganar un «sitio» a base de esfuerzo. «Luego yo me equivocaré mil veces, pero intentaré acertar y no le voy a regalar nada a nadie». 

Ramis también se refirió a la desvinculación de Nono González en el último día de la ventana de fichajes. Tal como explicó, la baja del extremo pacense fue una opción que se manejó desde el inicio de la pretemporada, siempre que se pudiera compensar con la llegada de un futbolista de garantías. «Si no, no se hubiera hecho».

Bajo estas condiciones, Ramis trabajó con Nono como si «no pasara nada». De hecho, participó en tres de los partidos de Liga disputados, dos de ellos como titular. «Pero en el fútbol aparecen estas cosas», es decir, la opción de Vallejo y la oferta del Ibiza por Nono, un exblanquiazul que se marchó «llorando» del vestuario del Tenerife.