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Liga Endesa

Huertas alarga el buen momento del Lenovo

El base brasileño, autor de 33 puntos y siete asistencias, fundamental en el triunfo contra el Obradoiro (86-83)

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Partido de la Liga Endesa: Lenovo Tenerife - Monbus Obradoiro MIGUEL BARRETO (EFE)

Un sublime Marcelinho Huertas, autor de 33 puntos y siete asistencias para 38 de valoración, ha conducido al Lenovo Tenerife a su decimosegunda victoria del curso tras doblegar por 86-83 a un Monbus Obradoiro que pese a verse 11 abajo justo antes del final del tercer acto (59-48) nunca se rindió hasta el punto de igualar el electrónico (68-68, 34'). Ahí, Huertas (13 puntos en el último cuarto) y al aparición de Fitipaldo (siete tantos seguidos) resultaron cruciales.

Antes, al Lenovo le costó mucho entrar en el duelo (su primer triple lo anotó después de 17 minutos), pero desde que encontró equilibrio con el tiro exterior (9/15 tras el 0/5 inicial) llevó la batuta pese a que no logró encontrar a Shermadini con asiduidad. Kyle Wiltjer, con 16 puntos, también resultó fundamental en la victoria canarista.

Amagó el Canarias con reeditar el inicio del duelo celebrado ante los santiagueses hace unos meses en el Fontes do Sar. Lo hizo errando sus cinco lanzamientos iniciales y dependiendo a continuación del acierto de un solo jugador, ya que Huertas anotó los seis primeros puntos de los aurinegros. Con el brasileño sacando tajada de su capacidad de definición ante la imposibilidad de jugar el 2x2, el Lenovo se agarró al choque pese a que su rival sí produjo en la continuación con Birutis y en las penetraciones de Robertson (9-7).

Pero donde más sufrió el cuadro lagunero fue para cerrar su propio rebote, en especial cuando el Obra jugó sin un cinco nato (Vicedo+Ellenson). Así, de cuatro segundas opciones, los gallegos produjeron nada menos que 10 puntos en un abrir y cerrar de ojos (14-17). Importante vía de agua a la que se unieron cinco pérdidas en el acto inicial, la dificultad de surtir balones al poste (el Obra colapsó muy bien la zona y ni Shermadini ni Wiltjer recibieron en condiciones) y las nulas opciones de buscar tiro desde el perímetro: 0/3 en triples, dos de ellos de Salin en el arranque (16-19).

Ya en el segundo acto el Canarias logró mayor fluidez en sus ataques. O al menos esa fue la sensación generada por la facilidad de Huertas para anotar y, por fin, para dar con Shermadini cerca de canasta. Pero ese paso al frente no le dio al cuadro lagunero, que fue incapaz de frenar a un Okouo muy hábil para aprovechar los cambios y desajustes defensivos de los locales (22-27); al margen de no dar con la tecla para evitar daños menores en el primer paso hacia dentro de Robertson (11 puntos al descanso).

Relativamente estabilizada la situación y en medio de un pequeño intercambio de golpes, el Lenovo puso en escena otro impulso, el de su producción exterior. Tardaron los isleños más de 17 minutos en acertar desde el perímetro, pero cuando lo hicieron su puntería fue desequilibrante. Anotó por dos veces Wiltjer en la frontal del aro con apenas 60 segundos de diferencia, mientras que Doornekamp cerró el cuarto con otros tres puntos desde los 45 grados. Estirón para rubricar un parcial de 15-6 que generó el 40-35 -máxima renta lagunera hasta ese momento- y en el que también tuvo mucho que ver la superioridad en los dos lados de la pista de Huertas (16 puntos al descanso) sobre Oliver, así como la implicación de los locales para cerrar su propio aro: el Obra no produjo ni un solo tanto en el segundo periodo. Que Scrubb, su hombre más en forma, alcanzara el intermedio sin anotar también explica que el Canarias se fuera a vestuarios por delante.

Dio continuidad el Lenovo a su acierto exterior en el arranque del tercer acto con un triple de Wiltjer (también anotó bajo el aro), aunque entre Scrubb y dos acciones seguidas de Birutis el Obra volvió a apretar el electrónico (45-44). Sin embargo, de nuevo la dupla Huertas-Shermadini (cuatro puntos cada uno) volvió a ser salvadora (53-48). Lo intentaron los de Fernández de nuevo sin un cinco puro y presionando a toda pista, pero ahí el Canarias afinó el punto de mira con sendos triples de Wiltjer y Fitipaldo (59-48, 28').

Lo paró Moncho con un tiempo muerto del que su equipo salió con la idea de agitar el duelo. Y lo logró el cuadro visitante toda vez que el Canarias se revolucionó más de lo debido y volvió a tener alguna fisura para cerrar su rebote. El Obra llegó situarse a cinco tras dos triples de Zurbriggen, pero como justamente 10 minutos antes, Doornekamp cerró el periodo con otro triple desde sus 45 grados (64-56).

Ya dentro del último acto, volvió a tener problemas el Canarias debajo de su tablero (segundas opciones que derivaron en triple de Vicedo y canasta de Robertson) para el 66-61. Respondió enseguida Huertas, pero el cuadro lagunero no dio con la continuidad deseada, ni delante (triple fallado por Salin y pérdida en saque de banda) ni detrás (triple de Robertson y Shermadini en cuatro faltas), lo que llevó la igualdad al marcador (68-68, 34').

Momento delicado en el que, quién si no, Huertas asumió la responsabilidad. Primero sacando una falta (dos libres), luego con su particular tiro a una pierna, y a continuación, cuando le retaron, con un triple para el 75-70 contra un rival al que se le había bajado la persiana y en el que solo Robertson parecía capaz de producir. Entre una bandeja de Fitipaldo y dos nuevos libres de Marce, el Canarias logró mantener su renta a buen resguardo (77-70 y 79-72) con solo tres minutos por delante.

El uruguayo, irregular durante casi todo el duelo, apareció en el momento crítico para añadir otra canasta y un triple posterior que prácticamente dejaba cerrado el choque (84-75). Lo intentó por todos los medios el cuadro visitante, con Robertson de estilete, pero el Canarias administró su ventaja (dos libres más de Huertas) para sumar la duodécima (86-83).

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