"Oye, Juan, que hay un chico aquí que es un escándalo, es buenísimo; me ha metido 36 puntos". Así se expresaba el grancanario Christian Díaz tras la exhibición de Papi Badio en un partido la Summer League de Gran Canaria de 2019, justo después de acabar su periplo con el CB La Matanza. Se confesaba el base ante su agente Juan Lasso, el mismo que lleva los designios deportivos del senegalés. Y lo cierto es que el representante no salía de su asombro. "En su día Rob [Orellana] me pidió que fuera a verlo, me pareció interesante y le dije que le buscaríamos una salida, pero no creía que fuera para tanto", reconoce el agente conejero.

Pero a raíz de aquella liga estival a Lasso le empezaron a llegar llamadas de asombro, por lo que terminó de convencerse. "No me lo pensé y llamé a uno de los que considero que es de los mejores entrenadores españoles de formación, Diego Ocampo [ahora en el Zaragoza] que en ese momento dirigía al filial del Barça, y le dije que sería muy interesante para él", explica Juan, que aún así no veía a Papi debutando en el primer equipo, "solo formándose". Ocampo quedó prendado con él. "He visto jugadores defender con intensidad, pero nunca durante tanto tiempo seguido", señaló de él el preparador gallego. Ahora, ejecutado el prematuro salto a la ACB, muchos hablan de NBA. "Habrá que ver si tiene hueco en la NBA porque no es nada sencillo pero el chico va como una moto, es serio, disciplinado, no descansa, solo piensa en basket... No me atrevería a ponerle límites", añade en un discurso sintomático de lo que puede ocurrir con Papi.